Mercado laboral
La República Checa presume de una tasa de desempleo muy baja, aunque la crisis provocada por la pandemia de Covid-19 impacta negativamente este indicador. Antes de la pandemia, el desempleo alcanzó aproximadamente al 3%, mientras que durante el año 2021 ha incrementado en aproximadamente el 4%, según se desprende de los datos de la Oficina de Trabajo de la República Checa.
La mayoría de los checos trabajan en el sector secundario. El número de extranjeros empleados ha aumentado significativamente en los últimos años, pero este desarrollo se ha visto afectado por la crisis causada por la pandemia. En la actualidad, los extranjeros representan alrededor el 15% de los empleados en la República Checa. La mayoría de ellos trabajan en procesos industriales y la administración, la menor parte en la administración pública. Desde el punto de vista de las nacionalidades, la mayoría de los extranjeros que trabajan en Chequia son ciudadanos de la Unión Europea, con los eslovacos en el primer lugar, seguidos por ciudadanos de Ucrania, Polonia, Rumanía y Bulgaria.
Conforme con el Código Laboral, la duración máxima de la jornada laboral permitida es de cuarenta horas semanales, con un descanso mínimo de media hora después de un máximo de seis horas de trabajo. El empleado tiene derecho a acudir al médico durante la jornada laboral. Asimismo, por ley puede gozar anualmente de veinte días de vacaciones. Las empresas más grandes generalmente ofrecen a sus empleados 25 días de vacaciones. En enero de 2021, el salario mínimo mensual ha aumentado a 15 200 coronas checas (aproximadamente 590 euros), que son 90,50 coronas checas por hora (aproximadamente 3,50 euros).
Desde el punto de vista legal, los ciudadanos de la Unión Europea, Suiza y los países del Espacio Económico Europeo (EEE), es decir, Islandia, Liechtenstein y Noruega, tienen los mismos derechos a obtener un empleo que los ciudadanos de la República Checa. Los extranjeros de terceros países que quieran permanecer en el país durante más de tres meses deben disponer de un permiso de trabajo, es decir, la tarjeta de empleado expedida por el Ministerio del Interior de la República Checa. Existe una excepción que aplica a aquellos que tengan la residencia permanente en la República Checa y, por lo tanto, disponen de los mismos derechos que los ciudadanos checos. El impuesto sobre la renta representa el 15% del salario bruto. Si las ganancias superan a 141 764 coronas checas mensuales (aproximadamente 5 500 euros), el impuesto sobre la renta aumenta al 23%.
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