Los checos siguen teniendo problemas con el sobrepeso
El número de personas obesas en la República Checa no ha aumentado desde el año pasado. En cambio, el crecimiento del número de niños obesos y de mujeres jóvenes con peso insuficinte se puede considerar alarmante.
El estilo de la vida es uno de los aspectos que más influye el peso y la salud, como explica Iva Málková, psicóloga y fundadora de la asociación “Stop a la obesidad”.
“En la República Checa casi una de cada dos personas pesa más de lo conveniente. De todas maneras se ha demostrado que el problema no consiste tanto en que los checos consuman más calorías sino en la escacez de actividad física. La tendencia de hoy, de dejar a los niños sentados frente al ordenador y llevarles dos veces a la semana a hacer algún tipo de ejercicio, pensando que todo está bien, es errónea. El estilo de vida sedentario forma parte del desequilibrio físico y la verdad es que tenemos que gastar más energía que recibir, si queremos perder peso”.
Otra conclusión alarmante del sondeo, es que más de una cuarta parte de las jóvenes entre 19 y 20 años, no supera el Índice de masa corporal de 18,5 lo que significa el peso insuficiente. Subiendo en la escala de la edad de las mujeres checas, la cosa tampoco mejora mucho – una de cada diez mujeres está bajo el límite del peso normal. Los médicos explican que hasta los treinta años las mujeres suelen conservar mejor su línea, así que la posible tendencia a la obesidad no se revela tanto. Por otro lado las dietas estrictas pueden dañar definitivamente los cuerpos de las más jóvenes.
El fenómeno del sobrepeso o la obesidad suele ir acompañado de depresiones, enfermedades y de otros aspectos negativos que pueden aumentar el riesgo, como el consumo de embutidos y la llamada comida basura pero también por ejemplo la posesión de un vehículo.
