“Ya no se encuentra trabajo en Praga como antes”
Emilio Jiménez consiguió casi sin proponérselo un buen puesto de gerente en una multinacional. A través de su blog ‘Un Manchego en Praga’ cuenta sus experiencias y sirve también de guía útil para cualquiera recién llegado a la capital.
Su caso no es en absoluto el del gran número de jóvenes españoles que han emigrado en los últimos años ante el frustrante panorama del mercado laboral de su país. Praga nunca fue uno de los destinos principales de ese flujo silencioso. Pero como comprobó Emilio, que rondando la treintena, acumulaba ya una buena experiencia laboral, sí que ofrecía muchas oportunidades inesperadas para un recién llegado.
Cuando se cansó de hacer turismo, pensó en empezar a buscar trabajo lentamente.
“Al cabo de las dos o tres primeras semanas, que ya conoces el centro de Praga, dices: ‘¿Qué hago yo ahora?’. Empecé a mirar un poquito, despacio. Mandé dos curriculums, me llamaron de los dos, pero cuando me llamaron del segundo ya me habían entrevistado del primero y ya me habían dicho que sí, muy rápido. Me quedé impresionado”.
Emilio llegó a Praga en el momento preciso sin proponérselo. En España la crisis ya golpeaba fuerte, pero en la República Checa el paro, aunque empezaba a aumentar, estaba por debajo del 8% y se seguían encontrando trabajos impensables en otros lugares. Una época dorada, pero por desgracia, ya acabada, cuenta.
“Si no encontrabas trabajo en España llegabas aquí y esto era gloria bendita. Pero ahora está el tema bastante complicado, no tanto como en España, pero sí que se nota que está más complicado. En mi empresa seguimos contratando y cuando miras los curriculums dices: ‘La gente lleva aquí mucho tiempo buscando’. Antes venía gente que estaba trabajando pero que iba mirando otras cosas, o llevaba solo un mes sin empleo. Ahora hay mucha gente que lleva seis meses, siete meses buscando trabajo”.Ahora el paro en la República Checa ronda el 9%. Muy alto para lo que están acostumbrados los checos, pero como un sueño para los españoles, en donde sigue creciendo y creciendo sin parar, situado ya por encima del 24% y con 5.600.000 personas sin trabajo.
Pero aunque parezca mucho mejor la situación en un lugar como Praga, Emilio advierte: si no sabes inglés como mínimo, y además el checo, mejor quédate en casa.
“La verdad es que todos estos programas de ‘Españoles por el Mundo’ están muy bien, pero al final, como solo entrevistan a la gente que le va bien, pues parece que están diciendo: ‘¡Vente aquí, que aquí vivimos todos fenomenal, nos compramos todos cochazos, vivimos todos fantástico!’. Y no es verdad. Muchas veces, como te vaya mal en tu país y vengas aquí con la idea de que te va a ir mejor, puede ser muy fastidiado”.
Emilio Jiménez, nacido en Manzanares, en la provincia de Ciudad Real, lleva el blog ‘Un Manchego en Praga’, que hace poco el servidor Acentos de Praga consideraba el mejor en español que se hace sobre la capital checa.
En él Emilio escribe tanto vivencias y sensaciones personales, como informaciones prácticas sobre la vida en Chequia, dice Emilio.
“A la gente de Acentos le gustó mucho el post del coste de la vida en Praga y me dijeron si lo podían poner, yo dije que claro. Estas cosas las escribo para mí, mis amigos, y para el que le pueda hacer falta. Entonces lo pusieron y me preguntaron si no me importaba que de vez en cuando volvieran a poner otros. Así que cuando escribo alguna cosa siempre intento que ellos lo puedan utilizar, o por lo menos intentar enfocarlo un poquito, porque está bien que esta gente lo coja y lo cuelguen, es estupendo”.‘Un Manchego en Praga’ comenzó simplemente como una manera relajada de contar a sus amigos lo que le iba sucediendo, recuerda, y curiosidades que iba descubriendo poco a poco.
“Empezó porque yo cuando me vine para acá, con mis amigos y con mis antiguos compañeros de trabajo, dije: ‘Os voy hacer un blog para que sepáis lo que me va pasando’. Al final lo dejé como un año y pico hasta que me puse con él. Al final es muy personal, yo no escribo especialmente bien, pero es un poquito cómo es esto a mis ojos, las cosas que me llaman la atención. Por ejemplo en Semana Santa lo de azotar a las muchachas con la vara es un poco extraño. Claro, lo intentas hacer en España y se montaría la de San Quintín. Distintos ojos van viendo la misma cosa de una forma muy distinta. Había tanto chicas que decían que es muy divertido porque te dan porque eres guapa y es flojito, como otras que decían que es horrible, una tradición horrorosa”.
Aderezado con expresiones manchegas propias del terruño, tan de moda en el humor español últimamente, ‘Un Machego en Praga’ ha ido abriéndose y encontrando otros lectores, fuera de su círculo de amigos. Ahora es un lugar donde probablemente puedan encontrar información útil sobre el precio del alquiler de una habitación, de un piso, tramitar documentación, o planes para hacer durante un fin de semana en Praga.