Roman Prymula deja todo cargo oficial tras asistir de público al Slavia-Leicester
Roman Prymula, exministro de Salud, y ahora ya también exasesor del primer ministro, defendía este mismo jueves un confinamiento duro en la República Checa de varias semanas. Unas horas después fue visto en un palco lleno de personalidades VIP disfrutando del partido del Slavia de Praga en la UEFA Europa League. Andrej Babiš anunció rápidamente el fin de su colaboración.
“Estamos llegando a una encrucijada en la que tenemos que tomar una decisión, y las opciones, realmente, ya no son muchas. O poner restricciones duras durante dos o tres semanas y después relajarlas, o seguir en el mismo régimen que tenemos”, explicó Roman Prymula en la Televisión Checa en la tarde del jueves.
Horas después, en una imagen publicada por el fotógrafo del diario Sport Pavel Mazáč durante el partido de la UEFA Europa League Slavia-Leicester, podía verse a varias caras bien conocidas de la política checa en el palco del club praguense. Además del canciller del presidente Miloš Zeman, Vratislav Mynář, el eurodiputado y vicepresidente del Partido Cívico Democrático Alexandr Vondra, el director de la Televisión Checa, Petr Dvořák, o la tenista Petra Kvitová, también estaba Roman Prymula. Todos con mascarilla FFP2 pero con escasa separación entre ellos, de una butaca como máximo.
Preguntado por la Agencia de Noticias Checa, Prymula respondió airado: “Sí, estaba allí con un test negativo de COVID de hacía dos horas y una mascarilla FFP2 en un partido de fútbol legal con una asistencia de espectadores permitida. Añadir que este año no he tenido vacaciones y ni mucho menos he viajado al extranjero. Parece que tengo que estar siempre en casa”.
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El pasado mes de octubre, tras aproximadamente un mes como ministro de Salud, tuvo que dejar el cargo precisamente por otras fotografías. Entonces, el diario sensacionalista Blesk cazó al ministro junto a otro político y el director del Hospital de Ostrava entrando y saliendo de noche a un restaurante praguense días después de haber anunciado él mismo el cierre de bares y restaurantes por la pandemia.
El primer ministro, Andrej Babiš, no tardó este jueves en anunciar el fin de su cooperación a través de Facebook: “El señor Prymula es un gran experto en epidemias, pero carece de inteligencia social. Esto está mal otra vez, por los hinchas de fútbol que no pueden ir al estadio y por la gente que queremos que se quede en casa. Por no hablar de la impresión que vuelve a dejar de soberbia. Hemos acordado terminar nuestra colaboración, porque esto no es posible”.
En cuanto a la legalidad de acudir al partido de fútbol con la que se defendía Prymula, el presidente del Slavia, Jaroslav Tvrdík, ya anunció por la mañana en la Televisión Checa que tenían permiso del Ministerio de Salud para acoger a cierta cantidad de seguidores. El Slavia estaba probando un sistema de pruebas de coronavirus para ir reintroduciendo seguidores en los campos de fútbol.
“Podría hacerse como para el personal autorizado en los partidos de liga pero para 600 personas. Aunque hoy las condiciones son más duras, hay que llevar mascarilla FFP2 y se van a hacer test PCR que tienen que pasar todos los patrocinadores e invitados del club entre las 9 y las 12 de la mañana. Es un proyecto piloto, aprobado por el Ministerio de Salud, que se llama ‘Salir de la oscuridad’ y si sale bien puede que pronto sea una forma de volver a traer a los hinchas al estadio”.
Después del partido, con la polémica ya desatada, Tvrdík defendió que, efectivamente, todos los invitados eran seguidores del Slavia, pero ya reconoció que se había cometido “un enorme error”. Este viernes, a través de Twitter, pidió disculpas a la hinchada del Slavia.
El ministro de Salud, Jan Blatný, entrevistado por el canal DVTV, también consideró incorrecto el comportamiento de Prymula y señaló que “es siempre un error dar mal ejemplo”.
Blatný también se refirió este lunes a otro de los asistentes al partido, el responsable sanitario Jan Marounek, que fue precisamente quien otorgó al Slavia el permiso para contar con una pequeña cantidad de público invitado. “No es apropiado que acuda al partido para el que otorgó ese permiso excepcional”, dijo Blatný.
En la mañana de este viernes, Roman Prymula debía acudir a la Radio Checa a una entrevista programada con Radiožurnal. El exministro se disculpó minutos antes con un mensaje de texto explicando que había abandonado todos los cargos oficiales, por lo que ya no comentaría la actualidad de la pandemia en la República Checa.
En la mañana del viernes, Prymula debía acudir a la Radio Checa a una entrevista programada con Radiožurnal. El exministro se disculpó.
La nueva polémica de Prymula surge en uno de los momentos más delicados de la pandemia, con la variante británica del coronavirus extendiéndose por la República Checa y la mayor incidencia de la Unión Europea, la capacidad hospitalaria agotándose y una gran desconfianza en la política y en las restricciones impuestas por el Gobierno, que muchos, incluso, no tienen problema en reconocer que no cumplen.