Partido Socialista Europeo pide un cambio en políticas ambientales
Coincidiendo con el inicio de la Cumbre contra el Cambio Climático en Copenhague, el VIII Congreso del Partido Socialista Europeo hizo en Praga un llamamiento para que en Dinamarca triunfen las negociaciones para frenar el proceso.
La secretaria de relaciones internacionales del Partido Socialista Obrero Español, Elena Valenciano, así lo entiende también.
“Como muy bien cuentan los eslóganes y las fotos. En este caso sí que cuanto más tardemos en darnos cuenta que tenemos que actuar, menos posibilidades tendremos de salvar esto”.
Sin embargo, la dirigente y diputada socialista mira con cierto pesimismo los resultados de la Cumbre de Copenhague.
“Parece que nos quedaremos a medio camino entre lo que sería deseable y un cierto ambiente de fracaso que había durante el último mes. El número de líderes que van a participar en la cumbre permite pensar que nos quedaremos a medio camino entre lo deseable y la frustración absoluta”. Como cambio más positivo, Elena Valenciano destaca la fuerza del proyecto presentado por la Unión Europea en Copenhague, que por primera vez lo hace de manera conjunta.
El Partido Socialista Europeo en Praga insistió en la reducción de emisiones de gases invernadero abandonando el uso de carbón como fuente de energía. Elena Valenciano defiende la apuesta española de incentivar la energía eólica y solar en contra de la nuclear, un debate que admite múltiples puntos de vista.
“La energía nuclear no es verde, es energía nuclear. Es verdad que mucho defienden que la nuclear es más verde que el carbón, que es negro. Pero hay que encontrar el equilibrio entre apostar por energías limpias, pero que a su vez no perjudiquen otros elementos del medio ambiente. En España hemos hecho una apuesta por ir reduciendo nuestra industria nuclear, pero debemos hacerlo poco a poco para no apagar el país”.Para el Partido Socialista Europeo, la Unión Europea debería liderar las políticas contra el cambio climático en el mundo, comprometiéndose a cumplir desde 2010 con el 30 por ciento de los objetivos en cuanto a emisiones. Y esto, independientemente de si otros países lo asumen o no en Copenhague.