Ex ministro de RR. EE. checo: “La comunicación en torno a la explosión de Vrbětice ha sido caótica”
Tomáš Petříček, quien hasta hace poco ocupó el cargo de ministro de Relaciones Exteriores de la República Checa, habló en una entrevista sobre el reciente conflicto diplomático con Rusia. En su opinión, la comunicación debería haber sido mejor.
Las relaciones entre Chequia y Rusia pasan por su peor momento. A una larga lista de desencuentros en los últimos años, se sumó a mediados de abril una información hecha pública por el Gobierno checo, que señalaba la implicación de los servicios secretos rusos en una explosión en la localidad de Vrbětice en 2014.
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Esto sacudió el tablero de las relaciones bilaterales y llevó a una expulsión de diplomáticos entre ambos países. Tras estos sucesos, la Unión Europea respaldó a Chequia, pero la respuesta fue más tibia de lo que la mayoría de los políticos checos esperaban.
Y a nivel interno, la situación sigue preocupando. La actitud ambigua hacia Rusia del presidente checo, Miloš Zeman, disgusta a la oposición. Además, el presidente y su círculo han mantenido reuniones con Rusia estos días en las que buscan soluciones alternativas a las sanciones impuestas.
Sobre estos problemas habló para la Radio Checa Tomáš Petříček, quien ocupaba el cargo de ministro de Relaciones Exteriores hace un mes y medio. Una derrota en las elecciones internas del Partido Socialdemócrata terminó de debilitar su posición en el Gobierno. No obstante, sus roces con el presidente de la República eran algo que ya venía de atrás, precisamente en relación con Rusia. De acuerdo con Petříček, Miloš Zeman ha actuado muchas veces de forma unilateral en este tema.
“No es la primera vez que sucede. A mí mismo me ha pasado que desde el Castillo de Praga se dé algún paso en lo que se refiere a las relaciones con Rusia, y que el Ministerio de Relaciones Exteriores no sea avisado hasta después de la reunión”.
Después de la expulsión de diplomáticos rusos y de la queja de Chequia ante sus socios de la Unión Europea, Rusia incluyó al país en su lista oficial de enemigos. Para Tomáš Petříček, este era un desenlace obvio analizando la situación durante los últimos años. Sin embargo, no cree que el impacto a largo plazo de estos acontecimientos sea tan significativo.
“Desde la parte rusa, es la confirmación de una tendencia que ya venía de lejos. Rusia elige selectivamente qué temas tratar en sus relaciones y no acepta algunos temas que serían importantes para la República Checa. Esto ha sido una respuesta por haber hecho público el suceso de Vrbětice. En mi opinión, era algo esperable. Afectará a nuestras relaciones durante un tiempo, pero su impacto económico y en otros terrenos será limitado”.
La oposición política en Chequia ha declarado al unísono que el Gobierno ha sido incapaz de recabar más apoyos externos debido a una mala comunicación.En opinión de Petříček, hay cosas que se podrían haber hecho mejor, y cree que la presión tras desvelarse la información de Vrbětice llevó a actuar de una forma apresurada. Pero no cree que el Gobierno haya fallado en conseguir el apoyo de la UE.
“Los resultados podrían haber sido mejores si todo se hubiera preparado con más detalle y no se hubieran dado algunos pasos bajo presión, o si nuestros debates de política interior hubieran sido más claros. Tal como se ha hecho, no podíamos esperar más de nuestros socios, pero creo que hay una señal clara de que la Unión Europa nos apoya”.
No son muchos los países de la Unión Europea que han apoyado las expulsiones de diplomáticos rusos de su territorio. Pero más allá de esas decisiones, a veces más simbólicas que prácticas, Tomáš Petříček asegura que lo importante es demostrar que la Unión Europea está unida por dentro y sus miembros se apoyan mutuamente.
Sobre su futuro en la política, Petříček no esconde que se plantea la opción de presentarse a la Cámara de Diputados por el Partido Socialdemócrata. Pero afirma que lo más importante es el futuro del partido, y que está dispuesto a ayudar desde cualquier posición. Por el momento, dice que no abandonaría el partido aunque no se cumpliesen algunas de sus aspiraciones.