Misteriosos cráneos de la iglesia de la Asunción de la Virgen
Enigmáticos cráneos, decorados con coronas de laurel dibujadas a carbón y con la letra T, trazada en la frente, son la principal raridad del osario en los subterráneos de la iglesia de peregrinación de Krtiny, cerca de la metrópoli morava de Brno. En dicho osario los visitantes pueden contemplar huesos de centenares de personas, descubiertos en 1991 en la cripta.
En 1943 hizo este relato el pensionista Antonín Cvilink, de 67 años, recordando la aventura vivida en los subterráneos de la iglesia de Krtiny cuando tenía 17 años.
En 1893 cuando trabajaba en las reparaciones de la fachada del templo, el muchacho penetró por curiosidad en la cripta donde sus vivencias fueron tétricas:
"Nos olvidamos completamente del trabajo. Teníamos miedo de que se acabase la última vela y en la oscuridad no lográsemos encontrar la salida.El miedo provocó pánico entre nosotros: tropezábamos con los féretros que crujían como si pisásemos la nieve, y el polvo nos cubría desde los pies hasta la cabeza. En el paroxismo de la desesperación y del pavor oímos el apito del capataz y guiándonos por ese sonido llegamos por fin a la escalera que conducía a la superficie".
Antonín Cvilink con sus compañeros fue por largo tiempo el último hombre que visitó la cripta del templo de la Asunción de la Virgen. En 1911 la iglesia recibió un nuevo pavimiento debajo del cual quedó tapada la entrada a los subterráneos.
Krtiny, uno de los lugares de peregrinación más antiguos y más conocidos de Moravia, está situado en el Karst Moravo, en el profundo valle del riachuelo de Krtiny. Su historia es antiquísima ya que se remonta a los albores del cristianismo cuando se dejaban bautizar en el lugar los primeros cristianos. El nombre Krtiny significa "bautizo" en español.La tradición de las peregrinaciones a Krtiny se creó en torno a una estatuilla gótica de la Virgen, esculpida en piedra hacia el año 1340. No se sabe cómo la milagrosa estatuilla llegó a Krtiny. Una leyenda narra que la habría descubierto un campesino entre la maleza.
Es más probable que la estatuilla hubiera sido donada a la iglesia local por el destacado noble Jindrich de Lipá que pasó los últimos años de la vida en la cercana ciudad de Brno en compañía de su gran amor: la reina viuda Elisa Reychenza.
En 1744 fue concluida en Krtiny la construcción de la iglesia de peregrinación de la Asunción de la Virgen, un monumental templo con la planta en forma de la cruz griega, que tiene 55 metros de largo y 37 metros de ancho.
La iglesia barroca de Krtiny suele ser llamada "la perla de Moravia" y los especialistas la consideran como una de las más bellas construcciones eclesiásticas checas.
El templo de la Asunción de la Virgen de Krtiny pertenencía al monasterio premonstratense de Brno-Zábrdovice. En la cripta de la iglesia fueron sepultados muchos monjes de esta orden. En su interior se guardaban también los huesos procedentes de los enterramientos en el cementerio adyacente a las iglesias medievales, demolidas antes de iniciarse la construcción del magnífico templo barroco.
El momento de redescubrir el secreto de los subterráneos del templo de Krtiny llegó en 1991 cuando dos espeleólogos encontraron en los subterráneos un hueco:"Iluminé el interior y quedé asombrado. Avisté montones de huesos humanos. Más tarde los contamos. En el recinto descubierto estaban depositados los huesos de por lo menos 975 personas. El volumen de los huesos alcanzaba casi 20 metros cúbicos", relataba uno de los espeleólogos.
Lo más curioso del hallazgo son doce cráneos que llevan dibujada a carbón una corona de laurel y en medio de la frente ostentan una gran letra T.
Los historiadores coinciden en que las pinturas en los cráneos proceden del siglo 17 y que los símbolos dibujados encierran un significado espiritual. Según una hipótesis, la letra T podría representar la letra griega tau que alude a un texto de la Biblia. En éste se narra que el profeta Ezequiel escuchó la orden de Dios de que recorriera Jerusalén y trazara la letra tau en la frente de los varones que se lamentaban de todas las atrocidades perpetradas en la ciudad.
La colección de los doce cráneos decorados con hojas de laurel y con la letra T es la única en su género en territorio checo. Los difuntos a los que pertenecían los cráneos, debían de tener algún rasgo de carácter común o un destino parecido.
Ha llegado a barajarse la hipótesis de que los enigmáticos cráneos habrían pertenecido a doce hidalgos protestantes ejecutados el 21 de junio de 1621 en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga. Las cabezas de los nobles decapitados fueron después exhibidas hasta 1631 en la torre que guarda el acceso al Puente de Carlos del lado de la Ciudad Vieja de Praga. Sólo la cabeza del conde Slik fue entregada a la viuda.En 1631 Praga fue tomada por las tropas protestantes de Sajonia. Las cabezas de los hidalgos protestantes ajusticiados fueron retiradas de la torre y sepultadas en el templo de Týn,en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, pero no se sabe dónde.
Cuando el bando católico recuperó Praga, los protestantes que habían sepultado las cabezas de los rebeldes ejecutados, se marcharon al exilio, llevándose el secreto.
Los exámenes realizados por los antropólogos indican que la colección de los doce cráneos de la iglesia de Krtiny no tiene nada que ver con los hidalgos protestantes decapitados. Uno de los cráneos incluso es femenino.El secreto de los cráneos de la Iglesia de Krtiny se mantiene. ¿Será para siempre?