Niños superdotados pueden ingresar en la escuela a los cinco años

Según la nueva Ley de educación primaria, los niños checos pueden ingresar en la escuela a los cinco años de edad. Sin embargo, la norma sólo se aplica a menores superdotados con un alto nivel de madurez emocional y social.

Foto: ČTK

La matriculación de los alumnos de escuelas básicas para el año escolar 2010/2011 ha comenzado en la República Checa. Por primera vez en la historia, los padres pueden matricular a niños con sólo cinco años de edad, siempre que cuenten para ello con el visto bueno de un psicólogo.

Ivana Slavíková, del Instituto de Asesoría Pedagógico-Psicológica, explica qué criterios deben cumplir estos niños.

“Además de tener dotes intelectuales superiores, el niño debe reunir una serie de criterios. El psicólogo evalúa su capacidad de trabajo, su madurez emocional y su adaptabilidad social, es decir, su capacidad de imponerse en un colectivo de niños mayores”, indica Slavíková.

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Los expertos advierten a los padres de los niños superdotados que tomen en consideración los pro y los contra. El ingreso prematuro en la escuela puede causar daños irreparables en la psique de los menores y traer más problemas que beneficios.

Según Slavíková, siempre es bueno conocer la opinión de otra persona. La psicóloga recomienda consultar el asunto con la maestra de la guardería infantil, que debería ser capaz de juzgar objetivamente las dotes de su niño.

“Los padres, en primer lugar, deberían conocer la opinión de la maestra de la guardería infantil. Actualmente preparamos materiales que les faciliten a las maestras estimar la madurez de los niños y, según esta evaluación, recomendar o no la consulta psicológica”, recalca Slavíková.deti nadane

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Según estadísticas oficiales, entre el tres y el cuatro por ciento de los niños checos son superdotados. A pesar de que las condiciones en las escuelas checas han cambiado bastante en este aspecto durante los últimos años, aún queda mucho por mejorar. Según el informe de 2009 de la Inspección Escolar Checa, sólo el 43 por ciento de las escuelas primarias son capaces de reconocer y desarrollar las dotes extraordinarias de los niños.