Llegan a Chequia los restos mortales del héroe de la resistencia František Moravec

Procedentes de Estados Unidos llegaron a la República Checa los restos mortales del héroe checoslovaco de la Segunda Guerra Mundial, el general František Moravec.

Foto: Josef Vostárek,  ČTK

En el aeropuerto de Čáslav, ciudad situada al este de Praga, aterrizó este martes un avión de la Fuerza Aérea checa con las cenizas del general František Moravec. Sus restos mortales fueron repatriados a la República Checa desde Estados Unidos, pasados 56 años de su muerte. Se cumplió así el deseo de los familiares del general, así como de todo el pueblo checoslovaco, de que los restos mortales de Moravec descansaran en su ciudad natal de Čáslav.

En el avión regresó a Chequia también una delegación encabezada por la ministra de Defensa, Jana Černochová, que mantuvo negociaciones en Washington sobre la futura colaboración de ambos países en el sector de defensa.

František Moravec | Foto: Instituto Militar de Historia

Antes de su regreso a Chequia, la ministra Černochová destacó el significado de la repatriación de los restos mortales del general František Moravec.

”Finalmente la familia del general Moravec verá cumplido su deseo de que sus restos mortales descansen en el cementerio de Čáslav. Estoy muy contenta de que se haya conseguido la repatriación. Esto pudo haberse realizado hace uno o dos años antes, pero a raíz de la pandemia de COVID-19 el plan original tuvo que ser aplazado”.

Foto: Luboš Pavlíček,  ČTK

La ministra Černochová destacó asimismo el aporte del general František Moravec a la lucha del pueblo checoslovaco contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

“El general Moravec fue un gran héroe, que entregó todo a la causa checoslovaca en la lucha contra los nazis. Fue él quien elaboró el plan del atentado contra el protector nazi de Bohemia y Moravia, Reinhard Heydrich. Desde el exilio en Gran Bretaña gestionó el entrenamiento de pilotos checoslovacos que en la lucha final cayeron en un combate contra los nazis en la iglesia de San Cirilo y San Metodio en Praga 2, barrio donde fui alcaldesa durante varios años. En junio de este año recordaremos el 80 aniversario de la muerte de estos héroes”.

Anita Moravec Gard, nieta del general, quien acompañó la urna con las cenizas de su abuelo a la República Checa, sostuvo que su familia poco sabía de sus actividades durante la Segunda Guerra Mundial, pues su abuelo nunca habló de esas cosas.

Anita Moravec Gard  | Foto: Luboš Pavlíček,  ČTK

“Mi abuelo nunca mencionaba su trabajo en casa, él nunca hablaba de eso con la familia. Pero todos sabíamos que fue el responsable de la operación Antropoid. Lo primero que hizo mi abuela cuando pudo regresar al país en 1990 fue visitar la iglesia de San Cirilo y San Metodio y rezó allí por los héroes. Fue muy importante para ella y para todos nosotros, porque sabíamos que esa fue la base para la libertad de Checoslovaquia. Nos llevó más tiempo del que hubiéramos querido, pero fue muy importante para el país”.

Anita Moravec Gard apreció que se haya logrado trasladar a Chequia la urna con las cenizas de su abuelo. Como sostuvo, esta idea surgió originalmente en el seno de su familia. Teníamos la sensación que él estaba muy solo allí en Washington, mientras que aún había familiares en Čáslav. Al principio se trató de una idea de la familia y luego alguien se enteró de la iniciativa y se decidió que todo debía transcurrir de forma oficial, indicó Anita Moravec Gard.

Foto: Luboš Pavlíček,  ČTK

“Por supuesto, fue una gran sorpresa para nosotros. Pensamos en semejante posibilidad recién hace unos años atrás. La idea fue de mi primo. Se trata de algo muy emotivo y para mí significa fortalecer los vínculos entre los dos países, porque mi abuelo murió como ciudadano estadounidense y ahora regresa a su ciudad natal. En este momento, tenemos una conexión mucho más fuerte a nivel familiar, en Estados Unidos y en Chequia, y también entre los dos países. Debo decir que muchos representantes del Ejército de Chequia y personas vinculadas al de Estados Unidos ayudaron para que esto se hiciera realidad. De alguna manera, él siempre unió a las personas, incluso 56 años después de su muerte siguió trabajando”.

La nieta de Moravec apuntó que su abuelo creía muy fuertemente en la libertad y la democracia. Tenía una personalidad muy fuerte que usó para ayudar a la gente.

También el nieto de František Moravec, Alan Moravec Gard destacó que la repatriación de las cenizas de su abuelo representa un gran reconocimiento de su labor por parte de la República Checa.

František Moravec  (primero de la izquierda) y Edvardem Benešem  (segundo de la derecha) | Foto: archivo personal de la familia Moravec

“La idea original comenzó en la familia. Estábamos buscando un lugar mejor para él, para que descansara en paz. Anita fue la persona clave, ella estableció los contactos en Chequia y empezó a unir a la gente, logró hacer que la idea avanzara e hizo los arreglos necesarios para que se concretara. Ella tenía pensado ir sola o con algunos de nosotros, en una iniciativa privada, llegar al lugar y depositar las cenizas, en Čáslav. Pero cuando otros se enteraron, se convirtió en un homenaje compartido para mi abuelo. Y debo decir que estamos muy impresionados y muy emocionados por todo lo que se ha hecho para llevar a cabo esta repatriación. Lo valoramos muchísimo”.

Durante la Primera Guerra Mundial, František Moravec luchó en las filas de los legionarios. Posteriormente prosiguió en Checoslovaquia en su carrera militar y trabajó para los servicios secretos que más tarde llegó a encabezar. En la víspera de la ocupación de Checoslovaquia por la Alemania nazi abandonó su país con un grupo de colaboradores y se marchó a Gran Bretaña, donde encabezó los servicios secretos checoslovacos en el exilio. Después de la guerra regresó a Checoslovaquia, pero abandonó nuevamente este país en 1948, tras el golpe comunista. Se fue a Estados Unidos, donde trabajó para el Gobierno de ese país. El general František Moravec falleció en 1966 en Washington.

František Moravec  (primero de la derecha) | Foto: Instituto Militar de Historia

El general Jan Beroun, director del Servicio de Inteligencia Militar checo, quien integró la delegación de la ministra Černochová a Estados Unidos, recalcó que el legado del general František Moravec resulta especialmente importante ahora, en vista de la guerra en Ucrania.

”Con la repatriación de los restos mortales del general Moravec regresa a la República Checa, su tierra natal, un héroe nacional. Su legado es evidente y más teniendo en cuenta lo que ocurre actualmente en Ucrania. Bajo cualquier circunstancia uno debe defender la independencia y la libertad de su país. Y el general lo hizo a lo largo de toda su vida”.

El nombre del general František Moravec lo lleva desde 1999 el grupo 601 de las Fuerzas Especiales del Ejército checo. Y sus restos mortales permanecerán para siempre en el cementerio de Čáslav, su tierra natal, tal como lo había deseado.

Autores: Ivana Vonderková , Jan Kaliba
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