Liliputin, una obra de ficción sobre los ucranianos inspirada en hechos reales

Jan Němec

El escritor Jan Němec acaba de publicar una colección de relatos titulada Liliputin. Aunque esté inspirada por los acontecimientos actuales en Ucrania, es un libro de ficción. “Sentí cierto pudor, respeto y una sensación de impertinencia para contar historias reales”, dijo el autor para la Radio Checa.

“La guerra me despertó rabia, rabia para escribir. Veía las noticias y envidiaba a los periodistas que estaban ahí. Pero en un momento empecé a percibir las cosas que no se contaban en las noticias. Intenté examinar, qué era lo que podía hacer la literatura en este momento. Como cuando una persona se enciende un cigarrillo con otro, escribí cinco cuentos”, caracterizó el escritor checo y antiguo presidente de la Asociación de Escritores, Jan Němec, su obra reciente, titulada Liliputin. Más detalles sobre el preludio de la escritura reveló en entrevista para la Radio Checa.

“Todo surgió poco a poco, de forma natural. Yo no planeaba escribir un libro inspirado en la guerra en Ucrania. Unos días después del estallido de la guerra escribí un relato, porque entonces tenía un encargo para hacer algún cuento. Pensaba escribir sobre otra cosa, pero como tenía la cabeza llena de esto, decidí intentar escribir algo sobre los hechos actuales. Y me di cuenta de que era posible”.

Liliputin,  Jan Němec | Foto: editorial Host

Liliputin es un libro de cinco relatos independientes. Dos de ellos están contados desde el punto de vista de Occidente, otros dos reflejan la perspectiva de los ucranianos y el último cuento deja espacio para el punto de vista ruso. Cuenta Němec que las perspectivas distintas no era algo que el autor se hubiera planteado con antelación, sino una forma de contar que el propio texto le había pedido.

“Por lo general, el motivo o el tema escoge la perspectiva solo, pero yo no la tenía al comienzo. Por ejemplo, vi un reportaje sobre los vientres de alquiler, asunto que está muy vinculado a las parejas occidentales que piden este servicio en Ucrania. En mi cuento la pareja es de Berlín. Otro relato es de Mariúpol, donde no quedó ningún occidental, así que estaba claro que el protagonista tenía que ser un chaval ucraniano en una ciudad que se va hundiendo en una miseria cada vez mayor”.

Němec enfatiza que su libro no cuenta acontecimientos o historias reales, sino que es una obra de ficción. Este género le permite contar cosas que el periodístico no le dejaría, por ejemplo, los problemas sociales que tiene Ucrania y que no desaparecieron durante la guerra, solamente no representan un foco de interés hoy en día.

La postura de Němec se puede observar en el relato que cuenta la historia de las pandillas infantiles que viven en la calle porque huyen de las instituciones estatales como hogares infantiles y centros de internamiento de menores. “Muchos niños ucranianos viven así, lo que contrasta con Europa Central”, señaló el autor. Asimismo explicó las razones que le llevaron a la ficción, aunque el estilo documental no era una opción desechada desde el principio.

“Hablé con algunos refugiados ucranianos y por un momento pensé contar historias concretas de ucranianos reales, pero había cierto pudor, respeto y sentimiento de impertinencia. Uno puede quedar con alguien que le cuente brevemente lo que ha vivido, pero en realidad usted no conoce a esta persona. Así que escogí el camino no documental, no periodístico. Elegí puntos interesantes, pero las historias me las inventé”.

El escritor admite que percibe el libro como un experimento y dice abiertamente que es una obra que está sujeta al tiempo ya que cuenta acontecimientos que suceden en la actualidad y a pocos cientos de kilómetros de distancia. Aunque el autor sea consciente de que su obra corre el riesgo de quedar superada rápidamente por los acontecimientos, igual piensa que esta literatura desempeña un papel muy importante hasta que llegue el tiempo en el que los propios participantes en el conflicto puedan contar sus destinos.

“Seguramente llegará el momento y a mí me hace mucha ilusión, cuando los ucranianos y los rusos empiecen a contar. Será muy interesante y muy doloroso, pero en este momento ellos luchan por un espacio en el que, ojalá, sea posible contar algo de manera libre. Me parece que es una cuestión de solidaridad. Nosotros como autores checos u occidentales podemos contar cosas y me parece bien sustituirlos mientras ellos mismos no pueden contar”.

Němec escogió para su libro el título Liliputin que hace referencia a un grafiti que aparece en la obra. Aunque el propio autor dice que no le gusta poner juegos de palabras de título, al fin y al cabo, este libro es un experimento y ya que es una obra abiertamente comprometida con los hechos actuales, Němec quería que cada uno entendiera el contenido del libro nada más ver su nombre. La única duda que le queda es quién lo va a leer. Con todas las noticias vinculadas a Ucrania que nos rodean, quién querrá leer sobre la guerra.

Autores: Martina Kutková , Šárka Jančíková
palabras clave:
audio

Relacionado