La Semana Mundial del Agua sin agua
En momentos cuando se celebra La Semana Mundial del Agua, la República Checa sigue enfrentando serios problemas debido a la escasez del agua y la consiguiente sequía.
El restablecimiento del sistema de estanques, la revitalización de algunas cuencas de los ríos, un mejor aprovechamiento del agua de lluvia y el cambio general de la estructura del paisaje. Estos son algunos de los puntos del programa del Ministerio de Medio Ambiente a fin de reducir el impacto de una fuerte sequía en la República Checa.
La falta de agua, provocada por la escasez de lluvias y poca nieve en el invierno, perdura en el país desde el año 2014, o sea seis años seguidos, de acuerdo con Radek Čekal, del Instituto de Hidrometeorología Checo.”Debido a que la sequía perdura varios años seguidos, sus impactos en todos los sectores de la sociedad son mucho más fuertes. Se intensifican a raíz de la gran escasez de lluvias y nieve que registramos desde el año 2014. A finales de julio del presente año el déficit global de agua de lluvia en el territorio de la República Checa fue de 450 milímetros”.
El motivo fundamental de esta desfavorable situación es el cambio climático que de alguna u otra forma afecta al mundo entero. En Chequia va subiendo paulatinamente la temperatura media, tanto en verano como en invierno, de acuerdo con Miroslav Trnka, del portal científico Intersucho.
”A causa del calor, de la subida de temperaturas, se evapora más cantidad de agua de la tierra y de los ríos, lagos y estanques. En verano hay pocas lluvias y en invierno poca nieve que, además, se derrite muy rápido y no alcanza a penetrar en capas más profundas de la tierra. Las lluvias en invierno son más seguidas, pero tienen como resultado que la nieve se derrite aún más rápido. Todo esto lleva a que el agua no se quede en el paisaje sino que desaparezca con mayor rapidez”.Como apuntara Trnka, en promedio faltan en la República Checa entre 200 y 300 litros de agua por metro cuadrado de tierra y la situación sigue empeorando. El mayor déficit de agua se registra en las zonas de Bohemia del Este.
La sequía tiene como resultado un mayor número de incendios y la proliferación de diversos escarabajos y parásitos que afectan la siembra agrícola y los bosques. La Asociación de Agricultores Privados anunció que la cosecha de este año alcanzará sólo el 30% de lo normal otros años. Como recalcó Jaroslav Šebek, presidente de esa entidad, para prevenir la caída del rendimiento de las tierras agrícolas a causa de la escasez de agua y otros males, hay que proceder a un cambio radical en el sistema de producción.
”La tierra debe estar sana, contener materia orgánica y cabe ponerla bastante mullida para que el agua de lluvia o de la nieve derretida se quede en ella. Naturalmente, junto con ello es necesario edificar pequeñas represas, estanques artificiales y otros sistemas para la retención del agua en el paisaje. Estas obras, además, podrían ayudar a reducir la temperatura ambiental en las zonas a sus alrededores”.En vista del cambio del clima y la subida de temperaturas, en algunas zonas de Moravia comenzaron a cultivar frutas y otros productos que provienen de países con un clima más caluroso, como aceitunas, dátiles y kiwi.
Además de la agricultura, la falta de agua se hace sentir igualmente en la industria y afecta la vida cotidiana de los ciudadanos, afirma Mark Rieder, director del Instituto de Hidrometeorología.
”La sequía y la escasez de agua de lluvia tienen influencia negativa en la industria, afecta la fabricación de electricidad, pero también la calidad de vida de las personas. En algunos lugares, por ejemplo, falta agua potable y hay que llevarla allá en cisternas. En este caso hablamos de la sequía socio-económica”.
No obstante, los ciudadanos checos gastan cantidades cada vez mayores de agua. Esta tendencia es evidente en especial desde el año 2013. Un checo gasta unos 89 litros de agua al día en promedio. Cada año el consumo de agua sube aproximadamente en medio litro diario por persona.En ocasión de la Semana Mundial del Agua, la Oficina del Gobierno checo inauguró este martes una exposición permanente al aire libre, bajo el título ‘El Agua y la Civilización’. La muestra fue instalada enfrente de la Villa de Kramář, tradicional sede de los primeros ministros checos. El proyecto destaca la importancia del agua y acerca su historia, presente y futuro en la Tierra.
Forman parte de la exhibición fotografías de los más antiguos canales de irrigación en Israel, así como tomas del impacto que causan los residuos plásticos en los mares y océanos a los peces y otros animales. Los visitantes pueden ver asimismo fotos del hidrólogo y geógrafo checo Bohumír Janský, quien en 1999 descubrió con su equipo el lugar de nacimiento del río Amazonas.