Krejčíková y Siniaková se coronan en la Copa de Maestras de Guadalajara
La mejor pareja de dobles del mundo cumplió con las expectativas alzando la Copa de Maestras en Guadalajara. Barbora Krejčíková y Kateřina Siniaková, ganadoras este año en Roland Garros y las Olimpiadas de Tokio, batieron en dos sets a la taiwanesa Hsieh Su-Wei y la belga Elise Mertens y luego hicieron llorar de emoción a Martina Navrátilová con su homenaje a la Revolución de Terciopelo.
La pareja número uno del tenis femenino mundial partía como favorita antes de la final tanto por su trayectoria a lo largo de todo el año, como por haberse impuesto ya a Su-Wei y Mertens el pasado sábado con gran contundencia. Con menor superioridad que hace unos días, pero con igual efectividad, tres roturas de saque y un solo break perdido en la hora y cuarto que duró el partido bastaron para llegar al 3:6 y 4:6 que da al tenis checo su primera Copa de Maestras con un equipo formado íntegramente por jugadoras nacionales. En el pasado habían levantado el trofeo de la WTA Andrea Hlaváčková, Hana Mandlíková, Helena Suková y Jana Novotná, pero siempre con una compañera de otro país. Por su parte, Martina Navrátilová es la jugadora que más veces ha ganado el torneo, 13, pero todas bajo nacionalidad estadounidense.
La mítica Navrátilová estaba precisamente en la entrega de trofeos en Guadalajara, que terminó siendo una experiencia de gran carga emotiva para ella. Cuando Barbora Krejčíková tomó el micrófono para los agradecimientos, no se olvidó de la fiesta nacional que se celebraba en Chequia este 17 de noviembre en la que se recuerda la Revolución de Terciopelo de 1989, y tanto Siniaková, pero especialmente Navrátilová, no podían contener las lágrimas.
“Hoy es un día muy especial para nosotros en la República Checa, pero también para nuestros amigos eslovacos. Es el día de la Revolución de Terciopelo. En Checoslovaquia teníamos unos estudiantes y unos ciudadanos muy valientes que salieron a la calle a manifestarse contra el régimen antidemocrático que teníamos. Gracias a ellos podemos vivir en un precioso país sin restricciones. Tenemos aquí a Martina Navrátilová, que fue forzada a emigrar de Checoslovaquia. Estoy muy feliz de no tener más ese régimen y poder vivir en libertad”.
La pareja checa cerró en Guadalajara un año de ensueño. Conquistaron Roland Garros, donde Krejčíková, además, hizo historia al ganar también la final de individuales. En verano, lograron para Chequia el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio. Y ahora, con esta victoria, se han quitado el mal sabor de boca de caer en la Billie Jean King Cup en Praga. Así resumía el año para la Radio Checa Kateřina Siniaková, que, además, terminará 2021 como mejor jugadora de dobles del mundo.
“París fue muy emocional, porque además Barbora ganó el torneo en individuales, recuerdo que yo estaba nerviosísima antes de su partido, que salió de maravilla. Después llegaron los Juegos Olímpicos. Representar a tu país no es algo que suceda todos los días y lo valoro mucho. Fue precioso conseguir la medalla de oro y que todo nos saliera tan bien. Y ahora es muy bonito terminar el año con otro trofeo”.
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Por su parte, Krejčíková ha pasado el año entero jugando dobles e individuales, por lo que a menudo no tenía ni un día de descanso entre partidos. La checa no ve problema en ello y piensa seguir haciéndolo, explicó a la Radio Checa.
“Claro que es difícil disputar individuales y dobles, pero cuando se tiene éxito en ambos y se disfruta, por qué iba a abandonar una de las dos categorías. Así que espero que nos siga yendo bien el año que viene y lo disfrutemos”.
Las checas se unieron en el palmarés de Guadalajara a Garbiñe Muguruza, que venció en la final individual a la estonia Anett Kontaveit en dos set y consiguió la primera Copa de Maestras para el tenis español.
