Velichovky, balneario en el que se asentó la Wehrmacht alemana
Durante este Radioviaje podrán disfrutar de baños en barro curativo, repasando algunos acontecimientos clave de la historia checa. Nuestro destino de hoy será el balneario Velichovky en Bohemia Oriental.
La aldea Velichovky se menciona por escrito por primera vez en el año 1389. En el registro de la propiedad de las tierras checas consta que la viuda de Jirík de Hustírany debió transferir un pagaré de Welichow a la iglesia de Zízeleves.
El nombre Welichow fue derivado probablemente de la denominación checa para una "cría grande" - "velký chov". En los años posteriores el nombre cambió de forma transformándose en el diminutivo Welichowek, puesto que se supone que la cría disminuyó. De allí hay sólo un paso para llamar a la aldea Velichovky.En el siglo XVI el hidalgo Bedrich de Hustírany heredó Velichovky. Su hermano Bavor Rodovský fue un alquimista conocido del emperador habsburgo Rodolfo II en la corte de Praga.
En el año 1603 compró el señorío de Velichovky Hanibal de Wallenstein, tío del famoso caudillo de las tropas imperiales en la Guerra de los Treinta Años, Alberto de Wallenstein. Éste nació en 1583 en la cercana aldea de Hermanice.
Hanibal hizo construir en Velichovky una iglesia renacentista, pero se endeudó tanto que en 1620 fue obligado a vender su dominio a Ana Salomena de Horovice. El esposo de Ana, el viajero y compositor Krystof Harant de Polzice y Bezdruzice, fue ejecutado con otros 26 nobles el 21 de junio de 1621 en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga tras la sublevación fracasada de los estamentos protestantes checos.
Ana Salomena no lloró mucho por su marido ni se preocupó tanto por la religión y en 1625 se casó con el noble católico Herman Cernín de Chudenice, que por sus fieles servicios al emperador romano-germánico y rey checo Fernando II de Habsburgo consiguió un gran patrimonio.La historia del balneario Velichovky se remonta hacia finales del siglo XIX, como nos explicó la directora económica del establecimiento, Marie Svábová.
"El balneario Velichovky fue fundado en 1897, el año siguiente fue inaugurada la primera temporada. Su fundación se debe al doctor Kutík quien antes del año 1890 descubrió un yacimiento natural de barro curativo y empezó a utilizarlo en su sanatorio en el pueblo cercano de Horicky para tratar el reumatismo".
Las propietarias del señorío de Velichovky, las baronesas Berta Bess Chrostin y Gabriela Spens Boden, mantenían relaciones estrechas con el propietario del señorío vecino de Belohrad, donde se abrió un balneario de barros ya en el año 1885. Después de recibir un dictamen pericial del renombrado balneólogo vienés Ludwig y contando con el apoyo del conde pudiente Harrach las hermanas procedieron a la construcción de un balneario en Velichovky.
Dos de las residencias construidas para los pacientes adquirieron el nombre de sus fundadoras: Vojteska según Berta y Jela según Gabriela.El balneario se abrió al público cosechando gran éxito, no obstante, cada año fiscal terminaba con un déficit. En 1907 Berta tuvo que vender el balneario con el corazón oprimido al médico Josef Moravec de Dvur Králové nad Labem.
El doctor Moravec empezó a ahorrar, asumió el cargo de director y centró su atención en la promoción editando una guía modernista, carteles etc. En uno de los establecimientos abrió un balneario de sol y en el bosque adyacente un balneario de oxígeno.
En 1912 Velichovky pasó a manos de la Central de las Cajas de Seguro Médico de Praga. A sus fines sirvió hasta principios de la Segunda Guerra Mundial cuando empezó a convertirse en una residencia para niños alemanes.
A finales de marzo de 1945 el balneario fue ocupado por el Estado Mayor del general alemán Ferdinand Schörner, comandante del Ejército Central (Mitte). Schörner se instaló en la villa del antiguo director del sanatorio. Con él llegaron a Velichovky unos mil soldados alemanes. El área del balneario se convirtió en una fortaleza militar, fue cerrada herméticamente y vigilada por gendarmes y efectivos de las tropas SS.
El 8 de mayo por la mañana acudió a Velichovky un convoy armado de la XXIII escuadra de exploración del Ejército estadounidense del general George Patton. La unidad estadounidense, mandada por el coronel Robert Pratt, entregó al Estado Mayor alemán el informe sobre la capitulación de la Wehrmacht. Schörner abandonó Velichovky en su avión antes de su llegada.Para conmemorar estos acontecimientos, cada año el 8 de mayo se realiza un desfile de automóviles históricos de la Segunda Guerra Mundial que sale de Praga y termina en Velichovky. El evento lleva el título de "Misión Velichovky".
Terminada la Guerra, el balneario Velichovky recuperó su misión original: curar a los pacientes que sufren males del aparato locomotriz aprovechando las propiedades del espeso barro cretáceo, alimentado por fuentes de agua que contienen carbonato cálcico y hierro. Se estima que las reservas del barro, que se aplica en forma de baños o envolturas, todavía durarán otros 150 ó 200 años.
La oferta del balneario incluye todo tipo de estancias, porque según dicen en Velichovky "cada cliente es de otra naturaleza y tiene otro problema de salud diferente", según explicó Marie Svábová.
"Decimos siempre que lo ideal para una terapia son tres semanas. Desgraciadamente es demasiado tiempo, para una persona que está empleada resulta imposible estar ausente en el trabajo por un período tan largo. También una semana puede significar un problema por eso decidimos ofrecer estancias de fin de semana que empiezan ya el jueves por la noche. Sin embargo, en este caso se trata de estancias de relajamiento, el cliente no puede esperar efectos curativos de largo plazo, se trata más bien de que la persona descanse del estrés y del trabajo. No obstante, puede repetir esta estadía varias veces al año".La mayoría de los pacientes del balneario Velichovky son de la República Checa, pero vienen también clientes del exterior. Un turista está de vacaciones en Praga y decide pasar cuatro días en un balneario. Velichovky está preparado para ellos.
Así como para los que deseen tomar un solo tratamiento individual.
"El cliente viene por la mañana, se somete a dos o tres tratamientos, y se va de nuevo. En este caso se trata en su mayoría de personas procedentes de la región. Las empresas contribuyen cada vez con mayor frecuencia a cuidar la salud de empleados. El empleado recibe un bono y viene a Velichovky para relajarse".
El balneario ofrece asimismo un programa de terapia especial a las mujeres después de la extirpación del pecho y a las pacientes que sufren incontinencia de orina, dos ámbitos en los que la asistencia médica queda bastante rezagada en la República Checa.
Entre los clientes que vienen exclusivamente para olvidarse del estrés cotidiano gozan de gran prestigio los llamados "enroques": programas de relajamiento que consisten en baños y envolturas en barro, y este año nuevamente se les agregan masajes con miel y chocolate, como indicó la directora económica de Velichovky, Marie Svábová."El cliente disfruta un masaje con crema especial de chocolate o cacao, y al final le untan el cuerpo con una crema que contiene, naturalmente, también chocolate".
¡Qué rico!
En los momentos libres el paciente puede asistir a una conferencia, un concierto o un baile. Los más activos pueden tomar prestada una bicicleta de montaña, ir a jugar a los bolos, al tenis o al golf.
"A cinco kilómetros de distancia de Velichovky se encuentra un campo de golf llamado América Nueva con 18 hoyos. Debido a que hoy es la tendencia de unir el balneario con el golf, hemos decidido ofrecer este tipo de estancia combinada y hemos tenido éxito. El cliente pasa la mitad del día jugando al golf y la otra relajándose en el balneario".
¿Cabe agregar algo?
Sí, que en el balneario Velichovky les espera un personal profesional y experimentado, así como muy agradable y acogedor. Vengan para convencerse.
Foto: Martina Schneibergova