Un checo entre los miembros de la OSCE secuestrados en Ucrania

Entre los ocho observadores de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) que se hallan prisioneros en Ucrania Oriental hay un ciudadano checo. Los rehenes se encuentran en la ciudad de Sláviansk, bajo vigilancia de las milicias prorrusas, que los consideran espías de la OTAN.

Foto: ČTK

Un oficial del Ejército checo se halla retenido como rehén de las milicias separatistas prorrusas que actualmente controlan la ciudad ucraniana de Sláviansk, en el este del país. El militar forma parte de un grupo de ocho observadores internacionales de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).

El grupo, en el que también hay tres militares alemanes, un sueco, un danés y un polaco, se encontraba en la zona para comprobar el estado del conflicto y verificar el desarme en caso de que se llegara a una solución diplomática. Los inspectores iban acompañados de un intérprete alemán, cinco soldados ucranianos y un chófer, que también se encuentran retenidos.

Lubomír Zaorálek, foto: Filip Jandourek, Archivo de ČRo

De acuerdo con el ministro checo de Relaciones Exteriores, Lubomír Zaorálek, la diplomacia checa comenzó inmediatamente a mediar para conseguir la liberación de los rehenes.

“Estamos en contacto tanto con la central de Viena, desde donde se coordina la solución al problema, como con el estado mayor ucraniano. También con los representantes de las instituciones que tienen sus delegados en esta misión de la OSCE. Este sábado tuvimos los primeros contactos con las milicias prorrusas, aunque sin éxito, y luego con el gobernador de la provincia de Donetsk”, declaró.

Foto: ČTK

Los paramilitares independentistas aseguran que se trata de espías de la OTAN, y se niegan a entregarlos si no es a cambio de presos de su bando. Los servicios secretos ucranianos afirman que el secuestro obedece a la necesidad de contar con escudos humanos en caso de una ofensiva del ejército ucraniano sobre la ciudad de Sláviansk. El informe de la inteligencia ucraniana indica que los retenidos se encuentran en condiciones infrahumanas, algo que los captores niegan. Por otro lado uno de los rehenes es diabético, y no ha quedado claro si tiene acceso a medicación.

Zaorálek confía en la posición negociadora de la República Checa, tanto por sus propios méritos como por su condición de miembro de la Unión Europea.

Frank Walter Steinmeier, foto: Arne List, Wikimedia CC BY-SA 3.0

“Estoy convencido de que aunque hubiera solo gente de países pequeños, o solo de la República Checa, mi colega Frank Walter Steinmeier y la diplomacia alemana, que tiene mejores contactos entre los políticos rusos que nosotros, intervendría igual que ahora. Y también creo que la República Checa tiene en Ucrania buena posición y muy buena fama. No tiene nada que ver que seamos pequeños. Por otro lado estamos acostumbrados a negociar y por desgracia lo hacemos a menudo. No es una situación nueva y por supuesto la solidaridad en Europa funciona de verdad”, afirmó.

En estos momentos un equipo de la OSCE se ha desplazado a Sláviansk para negociar la entrega de los retenidos. El embajador ruso en la OSCE, organización de la que Rusia es miembro, ha asegurado que los rehenes acabarán siendo entregados. Al mismo tiempo el Ministerio de Relaciones Exteriores alemán ha organizado en Donetsk un equipo de emergencia para empujar a los sublevados a la vía diplomática.