Subsidios, trabajo y educación para facilitar al máximo la llegada a los refugiados ucranianos
El Gobierno aprobó este miércoles un paquete de medidas para que los refugiados ucranianos puedan acceder inmediatamente al mercado laboral o a la educación tras llegar a Chequia. También anunció las nuevas ayudas financieras que podrán solicitar para cubrir gastos básicos.
El Gobierno de Petr Fiala ha reaccionado a la llegada masiva de refugiados de la guerra de Ucrania con un paquete al que se ha empezado a conocer como ‘Lex Ucrania’. Ante todo, se dan 30 días en lugar de los 3 originales, para acudir a registrarse a la Policía de Extranjería. Se pretende evitar así el colapso que han sufrido estos centros en ciudades como Praga o Brno. Con una cantidad estimada hace dos días de 150 000 refugiados que ya habrían llegado a la República Checa, la gestión de esta oleada de personas no será sencilla.
Para agilizar los trámites y que estas personas puedan valerse por sí mismas lo antes posible, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Marian Jurečka, anunció que los ucranianos no necesitarán un permiso de trabajo. En cuanto el Parlamento lo apruebe, previsiblemente en la mañana de este viernes en régimen urgente, los ucranianos podrán acceder a un trabajo en Chequia de la misma forma que un checo o un ciudadano de la Unión Europea, dijo el ministro.
“Sin ningún tipo de complicaciones ni burocracia, tendrán el acceso abierto al mercado laboral en las mismas condiciones que el resto de ciudadanos”.
Chequia cuenta para ellos con la ventaja de la tasa de desempleo más baja de toda la Unión Europea. Muchas empresas podrían así acabar con el problema sistémico de sus dificultades para encontrar trabajadores.
El Gobierno también presentó las ayudas financieras que dará a estos refugiados, en su gran mayoría mujeres con niños que salieron de su país con poco más que lo puesto. Estas serán de unos 200 euros que recibirán todos los llegados tras el 24 de febrero que así lo soliciten. En caso de necesidad, pueden pedir esta misma ayuda en los próximos meses. La intención del Gobierno es, sin embargo, que los refugiados encuentren trabajo cuanto antes y no necesiten más ayudas de este tipo, dijo Jurečka.
“Contamos con que cuando estas personas empiecen a trabajar, dejarán de tener derecho a la ayuda financiera. Por eso es también nuestra intención integrarlos rápidamente en el mercado laboral”.
El Estado también ayudará a los hoteles y pensiones que acogen refugiados. Por cada persona adulta alojada recibirán al día 7,10 euros, y por cada niño menor de 10 años, 3,55 euros.
Los gobiernos regionales fueron los primeros en pedir ayudas para el sector hotelero, después de que se llenaran las 4000 habitaciones que la Asociación de Hoteles y Restaurantes puso a disposición de la administración por todo el país para albergar refugiados.
Con estas ayudas, el sector podría ampliar la cantidad de habitaciones destinadas a las personas que huyen de la guerra, como explicó a la Televisión Checa Václav Stárek, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes checa.
“La capacidad hotelera de nuestros miembros es de 85 000 habitaciones, pero ya no somos capaces de alojar más refugiados de forma completamente caritativa. En el momento actual, después de dos años de coronavirus, sería necesario que se cubrieran al menos los gastos básicos”.
El Gabinete de Petr Fiala también amplía en sus nuevas medidas los plazos para matricularse en centros de enseñanza secundaria hasta la primera semana de abril y permitirá que los niños refugiados pronto puedan empezar a asistir a la escuela en clases con compañeros checos.
El Gobierno también se planteó ofrecer unos 40 euros al mes a las familias por cada refugiado que acogieran en sus casas, pero la propuesta se cayó finalmente del paquete.