Škoda Transporte modernizará los ferrocarriles checos

Foto ilustrativa: Archivo de Škoda Transportation

La compañía Škoda Transporte ha ganado una licitación millonaria para modernizar 93 vagones de ferrocarril propiedad de la empresa estatal de ferrocarriles checos. Los trenes mejorados prestarán servicio en la línea que une Praga y Hamburgo a partir de 2016, en virtud de un nuevo contrato firmado con Deutsche Bahn.

Foto ilustrativa: Archivo de Škoda Transportation
Škoda Transporte, que ha conseguido varios importantes contratos de exportación en los últimos años, puede presumir de alzarse con otro acuerdo millonario. El líder en el campo de la ingeniería de transporte ha logrado ganar una licitación para actualizar algunos de los trenes de la compañía estatal de ferrocarriles, con un proyecto que se ha impuesto sobre sus competidores eslovacos, polacos y españoles.

Los trenes, que pueden circular a 200 km por hora, se utilizan en la línea de Praga-Hamburgo y su actualización será el proyecto de modernización más caro jamás realizado por los ferrocarriles checos. La compañía pagará más de 40 millones de euros por la modernización de 93 vagones, una cifra 7 millones superior a la que se esperaba. Según Škoda Transporte, esto es debido a que el cambio de imagen será extenso -algunos de los vagones serán equipados con accesos sin barreras para las personas con movilidad reducida y se creará una zona multifuncional para el transporte de un gran número de bicicletas y cochecitos-. Todos los vagones tendrán aire acondicionado, conexión Wi-Fi gratuita y cada tren estará equipado con un sistema de circuito cerrado de televisión externa e interna.

La principal estación de ferrocarril de la ciudad de Hamburgo,  foto: Alchemist-hp  (talk),  Wikimedia CC BY-SA 3.0
La actualización de algunos de los vagones va a costar en torno al millón de euros, lo que equivale a la mitad del precio de uno nuevo. Bajo las condiciones del contrato de Pars Nova, que cae bajo Škoda Transporte, se deberán concluir los trabajos de modernización a finales de este año para que los trenes se puedan poner en funcionamiento a partir de 2016. Mientras tanto, la empresa tendrá que presionar para adquirir la aprobación para el uso de sus locomotoras 380 en la línea Praga Hamburgo, que, por el momento, no ha logrado.