Perspectiva de cooperación entre la República Checa y Rusia

Presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin (Foto: CTK)

Una visita oficial a la República Checa realizará en los primeros días de marzo el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin.

Presidente de la Federación Rusa,  Vladimir Putin  (Foto: CTK)
Las relaciones entre la República Checa y Rusia han registrado últimamente un amplio desarrollo, habiendo logrado superar los problemas del pasado, entre ellos la deuda rusa con la República Checa.

"Nuestras relaciones bilaterales se basan en ricas tradiciones históricas y continúan desarrollándose", señaló el presidente ruso, Vladimir Putin, refiriéndose a su próxima visita a la República Checa. Putin recordó la ampliación del intercambio económico y comercial entre Moscú y Praga, así como los vivos contactos en el sector cultural.

Los comentaristas sostienen que las relaciones políticas entre los dos países registraron un enfriamiento a comienzos de los años noventa, con la caída del comunismo en Europa. Negativamente reaccionó la Federación Rusa a la entrada de la República Checa en la OTAN y el diálogo mutuo se vio afectado asimismo por el conflicto armado en Chechenia, en vista del amplio rechazo de la opinión pública checa a la invasión de las tropas rusas a Chechenia.

El actual mejoramiento de las relaciones mutuas se debe en especial a la nueva política exterior de apertura hacia Occidente practicada por el presidente ruso Vladimir Putin. Esta ofrece nuevas posibilidades para el intercambio comercial entre Praga y Moscú. El año pasado los dos países firmaron varios acuerdos de cooperación económica, parte de los cuales fue también un convenio para la realización de 17 proyectos mutuos por un valor de dos mil millones de dólares aproximadamente. Se trata, por ejemplo, de la modernización de una empresa para la fabricación de vagones de ferrocarril en la zona de Sverdlovsk, en los Urales, o de la edificación de un circuito vial para facilitar el transporte en San Petersburgo.

La República Checa traza el objetivo de superar el marcado déficit en su balance comercial con Rusia. Mientras que en las importaciones checas de Rusia predominan materias primas estratégicas como petróleo y gas natural, las exportaciones checas hacia el este se centran en máquinas y medios de transporte. Praga persigue acrecentar sus inversiones en Rusia, en especial en los sectores de los transportes, procesamiento de petróleo y en la industria vidriera.