Praga congela las propiedades rusas en territorio checo
El Gobierno ha aprobado la congelación de las propiedades de la Federación de Rusia en territorio checo. Los rusos no podrán gestionarlas ni sacar provecho de las ganancias del alquiler de apartamentos.
Chequia decidió congelar las propiedades rusas en su territorio. El paso fue precedido por la inclusión en la lista de sanciones checas contra Rusia a otra empresa estatal de ese país que administra unos 70 inmuebles en Chequia. Se trata, sobre todo, de viviendas en Praga, la región de Bohemia Central y Karlovy Vary, así como de inmuebles en parcelas del servicio diplomático checo. El número de anotaciones en la lista nacional de sanciones subió así a siete.
El motivo de ese paso fue que la compañía en cuestión, que administra propiedades rusas también en unos 70 países del mundo, es controlada directamente por la administración del presidente, Vladímir Putin, según recalcó el ministro de Relaciones Exteriores checo, Jan Lipavský.
“Esta compañía es gestionada por la administración del presidente Vladímir Putin, que mantiene una guerra contra Ucrania. No queremos permitir que la compañía siga pagando el asesinato de ucranianos. Esa empresa gana dinero porque alquila apartamentos y tiene relaciones jurídicas con particulares, con los inquilinos”.
Exigir a la empresa el cumplimiento de la parte financiera de la sanción le fue encargado a la Oficina de Análisis Financiero. En primer lugar se le encargó bloquear las cuentas bancarias de la compañía, sostuvo el ministro Lipavský.
“Eso es necesario para que la persona física en cuestión no pueda sacar dinero de la República Checa. Así también se le impide operar con las propiedades de la empresa, inscritas en el catastro inmobiliario, incluida su eventual venta. Puede ser que en los registros este bloqueo aparezca en un par de días, pero a la compañía que administra las propiedades rusas en el exterior, la información debería llegarle de forma inmediata”.
De acuerdo con el canciller checo, a partir de ahora todas las actividades comerciales de esa compañía, incluido el alquiler de apartamentos en sus inmuebles, serán calificadas de ilegales. Praga, además, congeló todas las propiedades rusas en Chequia.
En reacción a esos pasos de la parte checa, el Ministerio de RR.EE. ruso llamó a consultas el viernes pasado al encargado de negocios checo en Rusia, Jiří Čistecký, y le comunicó su desacuerdo con esa actitud arbitraria, y que Moscú adoptaría algún tipo de respuesta.
El canciller checo, Jiří Lipavský, sin embargo, no cree que eso suceda. Indicó que, además, Chequia tiene pocos inmuebles en la Federación Rusa por los que tenga que preocuparse.
LEA TAMBIÉN
Según Lipavský, la decisión de congelar las propiedades rusas fue una decisión política que podría ser seguida por otros países de la Unión Europea, ya que Chequia es el primer país del mundo que procede a ello. Cabe convencer ahora a Bruselas y a otros países comunitarios de la importancia de ese paso.
Muchos empresarios rusos, vinculados de alguna forma con el régimen de Vladímir Putin trataron de vender lo más pronto posible los inmuebles que tienen en Chequia por temor a ser incluidos en la lista de sanciones checa, que fue aprobada por el Parlamento como Ley de Sanciones el 1 de enero de este año. Según informaciones de la Televisión Checa, entre otros, se trata de la familia del exministro de Transportes, Igor Levitin, actualmente consejero de Vladímir Putin, así como del exdiputado por el partido Rusia Unida, Viacheslav Timchenko.