Paciencia, paciencia y más paciencia en la autopista D1

Autopista D1

La modernización de la autopista D1, la principal vía de comunicación entre las ciudades de Praga y Brno, empieza una fase primordial que afectará la circulación de vehículos como nunca antes en la historia de dicha carretera.

Autopista D1 | Foto: Daniel Burda,  Český rozhlas
La velocidad máxima permitida en las autopistas checas es de 130 kilómetros por hora. No obstante, las obras de modernización de la autopista D1, obligan a los conductores a reducir la velocidad en diferentes tramos a unos 80 kilómetros por hora, lo que complica la circulación de miles de vehículos al día.

De acuerdo con los expertos en seguridad vial los problemas en la D1 no se deben únicamente a la reducción de la velocidad máxima permitida o a la limitación de los carriles, sino que en muchos casos a la indisciplina de los conductores.

La limitación a un carril entre los kilómetros 83 y 76 en dirección Praga representa, según los especialistas, una de las mayores limitaciones para los conductores durante las obras de modernización de la D1, tal y como lo confirmara desde el lugar la reportera de la Radiodifusión Checa, Olga Štrejbarová.

“Los paneles informativos indican que entre los kilómetros 83 y 76 la circulación se reduce a un carril y que es necesario disminuir la velocidad. Esta situación responde al derribo de puentes y se prolongará durante tres días. Se espera que después todo vuelva a la normalidad en dicho tramo”.

Aviso: limitación de los carriles,  foto: ČT24
Las obras de modernización empezaron en mayo y está planeado que terminarán en 2018. Los trabajos se han visto afectados por una serie de problemas con las empresas constructoras que en algunos casos trataron de aumentar el precio original de las obras. El Ministerio de Transportes asegura que todo avanza y que se cumplirán los planes establecidos.

La idea de construir una autopista para unir las ciudades de Praga, Brno y Ostrava surgió en los años 30 del siglo pasado. El proyecto se conoció como la Carretera Nacional y contaba entonces con un tramo hacia la ciudad de Pilsen, que en la actualidad ya existe.

La situación política del país afectó la realización del proyecto. La anexión forzada de los Sudetes al Tercer Reich cambió los planes. Los nazis cancelaron los trabajos en 1942, y no fue hasta después de finalizada la Segunda Guerra Mundial que se dio luz verde a la construcción de la autopista. No obstante, con la llegada de los comunistas al poder en 1948 no se continúo con el proyecto.

La idea revivió en 1967, y en 1971 fue inaugurado el primer tramo entre la capital y la ciudad de Mirošovice, un poco más de 30 km.

Construcción de la autopista D1 | Foto: Filip Jandourek,  Český rozhlas
El régimen comunista checoslovaco pretendía ir mucho más allá y unir la capital checa con la ciudad de Košice en Eslovaquia. Antes de la partición de Checoslovaquia la autopista conectó Praga y Bratislava.

La mayor autopista checa tiene actualmente 377 km, pero ya no cumple con las exigencias del momento. El número de automóviles ha aumentado vertiginosamente y la carretera no fue construida para circular a altas velocidades, de ahí la urgencia de efectuar la actual modernización.

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