Chequia quiere atraer a profesionales jóvenes de España y Portugal
La República Checa apuesta por solucionar su escasez de mano de obra con jóvenes calificados del sur de Europa.
Por muchos años, el mercado laboral checo se ha caracterizado por uno de los niveles de desempleo más bajos en toda Europa. Sin embargo, según la Cámara de Comercio checa, la tasa de desempleo subió al 3,7% en diciembre, con unas 280.000 personas sin empleo para 272.000 plazas vacantes. Según Eurostat, en noviembre de 2023, la tasa era de 2,5%, la más baja de toda la Unión Europea.
No obstante, esta situación de pleno empleo puede resultar problemática a largo plazo en varios sectores, ya que cada vez más empresas se quejan de la escasez de mano de obra, tanto calificada, como poco calificada. Además, en los últimos dos años, a causa de la guerra en Ucrania, muchos ucranianos han buscado refugiarse en la República Checa, especialmente muchas mujeres en edad laboral. Pero esto satisfizo sólo parcialmente las necesidades de los empleadores.
Conscientes de que los demás países europeos, tanto dentro como fuera de la Unión Europea, se encuentran en la situación opuesta, las empresas y el gobierno checos empiezan a dirigir su mirada a otros mercados de trabajo, especialmente España y Portugal.
El jueves, durante una conferencia de prensa, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Marian Jurečka, confirmó que se planea un modelo que favorezca el reclutamiento de nuevos trabajadores del extranjero.
“Ya hemos tomado las medidas necesarias para atraer a estas personas en nuestro mercado laboral. En ciertos países, como España y Portugal, la tasa de desempleo es considerablemente mayor que el promedio de la Unión Europea. Para los jóvenes, usualmente varía entre un 10% y un 15%, a veces más todavía. Deseamos atraer una mano de obra altamente calificada, especialmente en los ámbitos de las tecnologías de información y la investigación. Por eso, nos gustaría establecer una cooperación estrecha con las agencias de trabajo y las instituciones que ofrecen servicios de colocación en estos países. Ahora, esta es la prioridad de la Cámara de Comercio checa”.
Sin embargo, el ministro añadió que, en primer lugar, se intentará aprovechar el potencial ya existente a nivel nacional y mencionó a los padres de niños pequeños, personas mayores, personas con discapacidad y refugiados. Entre las medidas que se tomarán para impulsar esta estrategia se encuentran el establecimiento de más guarderías, la ampliación de puestos de trabajo a tiempo parcial, una ley de empresariado social, así como el refuerzo de los cursos de lenguas.
Según Milena Jabůrková, vicepresidenta de la Confederación de Industria de la República Checa, las empresas sufren principalmente una escasez de mano de obra en oficios técnicos. Añadió que nueva fuerza laboral se puede encontrar en países como India, Indonesia, Vietnam y Filipinas. Dijo también que los ciudadanos de otros países de la Unión Europea desean llegar a trabajar en Chequia, ya que los empleadores ofrecen condiciones salariales y de trabajo cada vez más atractivas para los mejor cualificados. Por tanto, es buena idea minimalizar las trabas burocráticas.
Finalmente, los estudiantes extranjeros también se consideran una fuerza potencial y, por eso, se están diseñando distintas medidas que reforzarán las posibilidades de estudiar en Chequia y que luego les abrirán las puertas del mercado de trabajo checo.
De acuerdo con la Cámara de Comercio, a finales del año pasado, 823.900 ciudadanos extranjeros trabajaban dentro de la República Checa, alrededor de 30.000 más dentro de un año. Ahora el objetivo parece ser el millón.
