Cada vez más españoles viajan a la República Checa en busca de trabajo

Foto: Comisión Europea

Cada vez más extranjeros del Sur de Europa, afectados por la crisis económica, vienen a República Checa. El número de españoles, griegos, italianos y portugueses se ha triplicado durante los últimos años. Se trata ante todo de las personas jóvenes que llevan mucho tiempo en paro y se les hace imposible encontrar cualquier tipo de trabajo en su país.

Blas Javier Palencia Lozano,  foto: ČT
Jóvenes con el título de ingeniero o arquitecto atendiendo llamadas en un call center. Ese es el destino de cada vez más jóvenes del Sur de Europa que se trasladan a Chequia en busca de nuevas oportunidades, según informan algunas agencias de empleo y los departamentos de recursos humanos de varias empresas.

Uno de los que encontraron su nuevo hogar en Praga es un joven murciano Blas Javier Palencia Lozano. Reparte su tiempo entre un puesto de profesor de español en la Universidad Carolina y una empresa de servicios informáticos. Esto es lo que opina sobre su estancia en Praga.

“Al principio mi padre me decía – ¿Qué estás haciendo? Estás cometiendo un error. Pero después de los años volví y él me aconsejó que lo mejor que podía hacer era permanecer aquí”, dijo Blas Javier que, de hecho, ya no quiere volver a España.

Foto: Comisión Europea
Italianos, españoles, portugueses y griegos están muchas veces sobrecualificados para los puestos de empleo que encuentran en la República Checa. Generalmente se trata de las de empresas de atención al cliente o call centres, donde se requiere el conocimiento de los idiomas extranjeros y aunque el salario no es tan alto, siempre resulta una mejor alternativa que quedarse en casa.

España, con casi la mitad de los jóvenes en paro, no ofrece unas expectativas muy positivas a los recién graduados. Quien domina al menos el nivel básico de inglés busca un empleo en el extranjero. Entre ellos la República Checa. Según los últimos datos de la Oficina de Estadística Checa el número de los españoles residentes en la Chequia es 751 y va creciendo. Posiblemente sean muchos más, ya que por tratarse de ciudadanos europeos no están obligados a registrarse como residentes para vivir y trabajar en el país.

Fábio Oliveira es otro de los que decidieron quedarse en Praga. Antes quería trabajar en Portugal como ingeniero pero al final abrió un bar en el barrio de Vinohrady.

Fábio Oliveira,  foto: Daniel Ordóñez
“El café-bar en Praga lo he abierto este verano. Es el primer café-bar portugués en Praga, en la República Checa. Me parecía una buena oportunidad porque hay cada vez más portugueses ”, indicó Fábio.

Sin embargo, no todos de los extranjeros se dirigen a Chequia debido a sus problemas económicos. Algunas empresas locales buscan ingenieros y otros trabajadores cualificados en el Sur de Europa simplemente porque no llegan a encontrarles en el país ni tampoco en la vecina República Eslovaca, ése es el ejemplo de la compañía Robert Bosch.

Otros de los sectores favoritos son los servicios IT y asesoría o turismo pero muchas veces también vienen personas buscando trabajo de menor cualificación como obreros, cocineros o camareros.