El coronavirus no es una gripe: se dispara la mortandad y se reduce la esperanza de vida en Chequia
En la República Checa fallecieron unas 17 000 personas más durante 2020 que la media de los últimos años. En algunas semanas de otoño, el coronavirus provocó hasta el doble de muertes que las que se habrían producido en condiciones normales.
Si bien las estadísticas oficiales reconocieron 11 870 muertes por coronavirus hasta el 31 de diciembre de 2020 en Chequia, la cifra total de decesos a lo largo del año, 129 100 personas, son unas 17 000 más que en los últimos años. Se trata de un aumento de las muertes de un 15%.
El Instituto de Estadística Checo advierte que un aumento semejante de la mortandad así no se vivía en Chequia desde 1945, el año que terminó la Segunda Guerra Mundial. Entonces hubo un aumento de muertes del 14,5%. Las mayores fluctuaciones registradas desde la década de los 50 fueron un descenso de la mortandad del 4% en 2004, y el aumento del 5% en 2015.
Pero no olvidemos que el coronavirus no empezó realmente a mostrar su dureza en Chequia hasta mediados de septiembre. Como explica Michaela Němečková, del Instituto de Estadística Checo, fueron esos meses de otoño los que se salieron de la normalidad.
“La mayor mortandad se registró en noviembre, cuando fallecieron 15 700 personas. En octubre murieron 14 200 ciudadanos y en diciembre 14 000. La última vez que se habían superado las 14 000 muertes en un mes fue en diciembre de 1995”.
Las muertes por coronavirus desde el principio de la pandemia hasta el 1 de octubre sumaban un total de 675. Desde entonces hasta ahora, cada semana ha superado holgadamente esa triste cifra. El aumento anual mencionado del 15%, representa, por tanto, una media hecha a dos partes del año muy diferenciadas. Desde que la situación se agravó en otoño, el aumento de la mortandad es muy superior y, en ocasiones, supone más del doble de la del mismo periodo en años anteriores, explica Terezie Štyglerová, también del Instituto de Estadística Checo.
“El máximo crecimiento alcanzado durante la última semana de octubre y la primera de noviembre superó incluso el 100%. Es evidente que, a diferencia de las epidemias de gripe, la población ha estado expuesta en 2020 a peores condiciones de mortandad y por un periodo más prolongado. La relación con la pandemia del coronavirus es incuestionable”.
Otro dato representativo: desde 2015 a 2019, solo un día se habían superado las 450 muertes en el país. En 2020, esto sucedió cada día sin excepción desde el 18 de octubre hasta el 19 de noviembre. El 2 de noviembre se alcanzó el pico de 656 fallecimientos.
El grupo de edad entre 75 y 84 años es el que mayor aumento de mortandad soportó en 2020. Por sexos, las muertes de hombres crecieron más que las de las mujeres.
Baja la esperanza de vida a niveles de 2013
El aumento de muertes ha provocado que por primera vez en décadas se reduzca la esperanza de vida al nacer en la República Checa. La de los hombres cae un año entero hasta los 75,3 años, mientras que la de las mujeres se redujo en 7 décimas y ahora es de 81,4 años.
Por desgracia, en las estadísticas ahora conocidas y analizadas, en todo momento se habla en pasado y únicamente de 2020. Pero la realidad es que la cifra de muertos con COVID-19 de este mes de enero, 4610 personas, ha superado las de diciembre y octubre, y solo se sitúa por detrás de noviembre, con casi 400 muertes menos.