Brno sí cree en Milan Kundera
El alcalde mayor de Brno, ciudad natal de Milan Kundera, entregó en París al escritor la ciudadanía de honor con la que la capital morava le ha distinguido. El gesto se produce cuando aún humea la polémica sobre su figura por su supuesta denuncia a un agente anticomunista en 1950.
Mientras que para el resto del mundo Milan Kundera es seguramente el checo más famoso y admirado, la República Checa se divide entre sus defensores y detractores. Entre tanto, el autor de ‘La Insoportable Levedad del Ser’, con ciudadanía francesa desde 1981, no hace mucho por mejorar las relaciones con su país de origen desde el mutismo que rodea su ‘exilio’ en París.
de su disidencia y de la crítica al régimen en sus obras, formaba parte del Partido Comunista por aquel entonces, calificó de mentira absoluta todas las acusaciones que le dedicaron los medios de comunicación checos.
Sin embargo, su ciudad natal, Brno, la segunda en importancia de la República Checa, quiso romper una lanza por el escritor coincidiendo con el 80 aniversario de su nacimiento. Como una muestra de apoyo lo considera el alcalde mayor de Brno, Roman Onderka.
“En primer lugar tengo que decir que esta distinción es de las mayores que la ciudad de Brno puede otorgar. Solo se entrega cada cuatro años. No sé si todos los concejales de la alcaldía la consideran como una muestra de apoyo y de confianza en defensa de Kundera, pero por mi parte lo es, sin duda”.
Miroslav Balaštík, redactor jefe de la revista literaria Host, también defiende al escritor.
“Este documento ha sido ya rechazado en varias ocasiones en las que se ha dicho que no prueba absolutamente nada. Creo que en este sentido ya no hace falta desmentir, ni argumentar nada, ni limpiar su imagen con premios. Creo que esta distinción de Brno a Kundera es un gesto de mayor valor para la propia ciudad”.
Una pluma estilográfica, un vino moravo y dos vasos de cristal hechos a mano acompañaron como obsequios del alcalde mayor de Brno la ciudadanía de honor que Roman Onderka le entregó el lunes en París. Milan Kundera volvió a evitar una visita a la República Checa excusándose por motivos de salud.