Amnistía Internacional acusa a Chequia de exportar armas a países no democráticos
Amnistía Internacional en República Checa acusa a los fabricantes y exportadores de material bélico de este país de enviar armas y municiones a países no democráticos, como Egipto y Etiopía. La organización internacional anunció que se dirigirá al Ministerio de Relaciones Exteriores para demandar que se adopten medidas necesarias para enmendar ese hecho.
Martina Pařízková, portavoz de Amnistía Internacional República Checa, sostuvo que casi la mitad de esos envíos acabó en países con regímenes no democráticos como Arabia Saudita, Egipto o Etiopía, lo que considera inadmisible.
“Condenamos la exportación de armas y municiones a Egipto, Etiopía y otros países. Esas armas podrían ser utilizadas contra civiles. En este caso se trata de violación de los Derechos Humanos”.Esta acusación fue rechazada rotundamente por Lubomír Kovařík, director general de la compañía armamentista Česká Zbrojovka, de Uherský Brod, quien insistió que no existe la eventualidad de que las armas checas sean exportadas clandestinamente del país a zonas de conflicto armado.
Las licencias de exportación de armas las concede el Ministerio de Industria y Comercio, que no obstante debe contar previamente con la autorización del Ministerio de Relaciones Exteriores. Éste determina si la licencia responde a los intereses político-económicos de la República Checa, indicó Jana Grohová, portavoz de la Cancillería checa.
”Nuestro ministerio analiza detalladamente los criterios más importantes. Especial atención se dedica al hecho de que el material militar no sea utilizado para violar los derechos humanos”.En cuanto a las exportaciones de armas de los países de la Unión Europea, la República Checa ocupa un lugar casi insignificante. El año pasado por ejemplo, a Alemania le correspondió el 11% de las exportaciones globales de armas y municiones de los países comunitarios, a Francia el 9% y a Italia el 7%, mientras que a la República Checa tan sólo el 0,7%.
Amnistía Internacional señala que sin embargo cada vez más municiones checas son exportadas al Golfo Pérsico y pistolas a Egipto. La organización considera necesario además que la Unión Europea adopte una política unificada en lo que respecta a la exportación de armas.Una eventual limitación de las exportaciones de material militar tendría un impacto negativo en la economía nacional y llevaría al aumento del índice de desempleo. Además, según indicó un gerente de una de las fábricas armamentistas de Chequia, la mayoría de la producción son armas y municiones para cazadores y también para policías. La parte militar representa sólo un 40% de todas las mercancías y la mayoría de las armas y municiones checas va destinada a los países de la Unión Europea y la OTAN.