El magnate Babiš tratará de formar un Gobierno minoritario
El líder del movimiento ANO, Andrej Babiš, ganador de las elecciones legislativas dijo que no es posible formar un gobierno de coalición.
En un programa de debate de la Televisión Prima dijo este domingo que las negociaciones con los líderes de los otros partidos que integrarán la nueva Cámara Baja ya no tienen sentido.
El político se quejó de que nadie quiere gobernar con él. Los líderes, o los órganos partidistas, de las restantes ocho formaciones han declarado que no se sumarán al nuevo gobierno de coalición.
El argumento de la mayoría es que Andrej Babiš tiene cuentas pendientes con la Justicia, y eso perjudicaría el renombre de sus agrupaciones. Babiš cuenta con el respaldo del presidente de la República, Miloš Zeman, que adelantó que le pedirá el martes la formación del nuevo Ejecutivo, ya sea de coalición o minoritario.Babiš adelantó que su Gobierno lo completará con expertos. Con excepción del ministro de Finanzas, los actuales ministros integrarán el nuevo Ejecutivo, explicó Babiš ante las cámaras de televisión.
“Espero que para el día 20 de noviembre tendré la lista de candidatos. Para muchos de ellos representa un riesgo, porque puede darse que el Gobierno no reciba el voto de confianza, ellos ocupan altos cargos y pueden salir perjudicados“.El ministro de Defensa, Martin Stropnický, solicitó pasar a otra cartera, según confirmó Babiš.
“Se trató más bien de un deseo, llegamos a un acuerdo. Hizo un buen trabajo, pero otra cartera puede resultarle más cómoda”.
Entretanto, las formaciones que ocuparon el segundo, tercer y cuarto lugar en los comicios tratan de modelar la futura Cámara de diputados. Los Piratas, por ejemplo, anunciaron que respaldarán al candidato de ANO a presidente de la Cámara. Parten de un principio muy sencillo, según indicó su jefe Ivan Bartoš, y es que la agrupación más votada tiene derecho a dirigir la Cámara, pero con vicepresidentes de los partidos que ocupan los puestos siguientes.El líder del Partido Cívico Democrático (ODS), Petr Fiala, asegura que a él, como representante de la segunda formación más votada le corresponde llevar las riendas de la futura Cámara.
Andrej Babiš ha lanzado fuertes críticas a sus rivales políticos asegurando que no mantienen una actitud positiva y que parece que no se han dado cuenta de que las que las elecciones ya terminaron, y que ha llegado la hora de gobernar.
Mientras Babiš busca una receta para evitar las elecciones anticipadas, el resultado de las elecciones ha tenido un alto coste político para algunos. La cúpula del Partido Socialdemócrata anunció que renunciaba y que ponía sus cargos a disposición.
La pérdida de 18 escaños, de un total de 33, le costó la cabeza al jefe de los comunistas, Vojtěch Filip, que después de 12 año al frente de la formación anunció su dimisión.