¿Adquirirá la RCh una valiosa traducción de la Crónica Checa del siglo XIV?
El Gobierno checo decidió contribuir con diez millones de coronas, es decir con más de 330 mil euros, para la adquisición de un fragmento de la traducción al latín de la Crónica de Dalimil, la obra histórica más antigua escrita en checo, procedente del siglo XIV. El manuscrito único se venderá en una subasta el próximo 17 de marzo en la capital de Francia.
"Hasta el momento nadie ha tenido la menor idea de que exista una traducción de la orginal Crónica checa de Dalimil de principios del siglo XIV al entonces idioma internacional, el latín. Ello influirá sustancialmente en nuestra visión de la historia checa de esa época".
Hasta ahora los expertos sólo tenían conocimiento de la existencia de dos traducciones al alemán de la Crónica de Dalimil. Parece que la traducción al latín surgió en Italia, apenas 30 o 40 años después de la aparición del original checo. Fue encargada probablemente por el rey checo Juan de Luxemburgo o su hijo Carlos IV. Los historiadores destacan ante todo el valor de las ilustraciones iluminadas, tratándose de la primera representación de personajes de las viejas leyendas checas.
El precio de partida del fragmento en latín de la Crónica de Dalimil fue estipulado entre 50 y 60 mil euros. Según el librero francés Christian Galantaris, encargado como experto de evaluar el manuscrito, el precio podría subir durante la subasta a 150 mil euros.
"Creo que un Estado, sea la República Checa o cualquier otro, debe tratar de adquirir, cueste lo que cueste, un documento de tal valor histórico, porque su lugar está en la Biblioteca Nacional de Praga. Si el manuscrito se le escapa a la República Checa por no reunir los recursos suficientes, por ejemplo, les aseguro que lo comprará un gran mercader internacional y unos seis meses o un año más tarde reaparecerá en un catálogo al doble del precio de adjudicación".La Biblioteca Nacional de Praga solicitó retirar el manuscrito de la subasta, proponiendo negociar su venta directamente, aunque el reglamento francés no lo permitió.
En los fondos de la Biblioteca Nacional de la República Checa están depositados en la actualidad tres manuscritos completos y dos fragmentos de la crónica checa en versos cuya autoría se adjudica a un tal Dalimil, persona probablemente de origen noble. De conseguir en Francia su traducción al latín, ésta sería expuesta junto con otros manuscritos del medioevo checo durante varios días en la Capilla de los Espejos del Klementinum, en Praga.