“No tendríamos que haber perdido este partido”

Chequia vs Gales, Ondřej Čelůstka, foto: ČTK/AP/Nick Potts

Chequia se llevó una dolorosa derrota de su visita a Gales en la tercera jornada de clasificación para el mundial de Catar 2022. La selección pagó caras la falta de acierto de cara a portería y la evitable expulsión de Patrik Schick.

Los ánimos de la selección checa llegaban por todo lo alto a Cardiff tras las buenas actuaciones de la última semana contra Estonia y, sobre todo, frente a Bélgica. El guion, sin embargo, se torció este martes en un partido que fácilmente podía haber terminado con un resultado completamente distinto.

Chequia vs Gales,  foto: ČTK/AP/Nick Potts

Finalmente jugó Ondřej Kúdela, muy señalado en tierras británicas por los presuntos insultos racistas que dijo al oído de Glen Kamara en el enfrentamiento entre el Glasgow Rangers y el Slavia de Praga. Algunos jugadores galeses en la grada mostraban camisetas contra el racismo y antes del pitido inicial, tanto los futbolistas de Gales como el cuarteto arbitral hincaron la rodilla en tierra, reproduciendo el famoso gesto contra la lucha racial, mientras los checos, en pie, se señalaban la palabra “Respect” bordada en la manga de todas las camisetas de la competición.

Desde el principio Chequia quiso desplegar su juego de los últimos tiempos y logró crear peligro. Especialmente Jakub Jankto tuvo varias ocasiones buenas de gol en la primera parte, pero sus disparos, por poco, no fueron entre los tres palos.

La mejor ocasión de los primeros 45 minutos fue, sin embargo, para Gales. Gareth Bale remató desde el área pequeña un gran centro que aún botó en el suelo y Vaclík sacó a córner con una mano milagrosa.

Chequia vs Gales,  Jakub Jankto,  foto: ČTK/AP/Nick Potts

El mismo guion, con mayor posesión del balón checa, pero con ocasiones y juego impreciso por parte de ambos combinados, parecía que se mantendría al empezar la segunda parte. Pero ya en el minuto 47 llegó el momento que marcaría el resto del partido. En un saque a balón parado al área galesa, Patrik Schick, agarrado insistentemente por un defensa local, en lugar de tirarse al suelo al no poder saltar al remate, respondió con una agresión. Una expulsión injustificable para el seleccionador Jaroslav Šilhavý, como expuso para la Radio Checa.

“Claro que se lo voy a reprochar a Schick. Es un jugador tan experimentado que aunque diga que le estaban agarrando, él no puede responder así. Creo que en el segundo tiempo habríamos tomado aire y habríamos presionado más al rival pero, por desgracia, ahí se acabó eso. Aunque luego el rival también se quedó con diez, pero esa expulsión influyó en el partido”.

Curiosamente, tras el shock inicial, los checos se rehicieron bien y fue en los siguientes minutos cuando gozó de sus oportunidades más claras, sobre todo Lukáš Provod, que no llegó a convertir por poco.

Jaroslav Šilhavý,  foto: FAČR

En el minuto 77, una muy rigurosa segunda amarilla a Connor Roberts, igualaba a diez jugadores los dos equipos y daba nuevos ánimos a Chequia. Y, sin embargo, justo después llegó el gol de Daniel James. El que actualmente es segundo portero del Sevilla y de la selección checa, Tomáš Vaclík, realizó un excepcional partido, dando mucha confianza a su defensa tanto con grandes paradas, con las que estaba logrando mantener a cero la portería, como con su juego con los pies. Sin embargo, nada pudo hacer con su estirada ante el cabezazo del delantero del Manchester United. Vaclík recordaba así la jugada para la Televisión Checa.

“No he llegado, no he llegado a ese balón. Creo que hemos dejado a Bale demasiado tiempo en la banda, se la ha podido colocar al pie izquierdo y hacer un centro fantástico que cayó justo por detrás de Bořil. Por desgracia, uno de los jugadores de menor altura en todo el campo nos ha metido un gol de cabeza”.

Chequia aún tuvo una ocasión clarísima en el descuento tras una estupenda jugada dentro del área rival, pero un defensa galés fue capaz de desviar el disparo a portería de Ondřej Čelůstka.

Chequia vs Gales,  Gareth Bale,  foto: ČTK/AP/Nick Potts

El seleccionador Šilhavý reconoció la gran decepción del equipo checo. “Estoy convencido de que no tendríamos que haber perdido este partido. Es una pena empatar con un gran equipo como Bélgica después de una actuación fantástica y luego perder contra un equipo con el que estábamos equilibrados”, dijo. La primera serie de partidos de clasificación para el que sería el primer mundial de Chequia desde 2006 termina, por tanto, con una victoria, un empate y una derrota y la sensación de que se podía haber conseguido mucho más.

Pero el centrocampista del Hertha de Berlín Vladimír Darida cree que este equipo lo tiene todo para darle la vuelta a la situación, contó a la Radio Checa.

“Por supuesto, estamos pensando en la clasificación directa. Claro que esto es una complicación. Quedan muchos partidos, la clasificación es larga. Tendremos que ganar a Gales y a Bélgica, pero no hay nada perdido, hay que levantar la cabeza y seguir luchando”.

Pero las malas noticias para el fútbol checo no llegaron solo desde Gales. A la misma hora que la selección absoluta, se jugaba todas sus opciones la sub-21 en el último partido de la fase de grupos del campeonato de Europa en la ciudad eslovena de Celje contra España. Dos goles en la segunda parte del delantero del Levante Daniel Gómez sellaron el pase de la Roja a cuartos de final y la eliminación de la competición de los checos.

Por su parte, la selección absoluta, antes de volver a la pelea por la clasificación para el mundial en otoño, le espera la gran cita de la Eurocopa en junio, en la que, de entrada, tendrá que medirse a Inglaterra, Escocia y Croacia.

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