Manuscritos históricos de la reina Isabel Riquilda vuelven a Brno 250 años después
Manuscritos históricos de gran valor, vinculados con la fundación en el siglo XIV del convento de las monjas cistercienses en Staré Brno, vuelven a reunirse en Brno después de unos 250 años.
El Museo de la ciudad de Brno inaugura este jueves una exposición denominada ‘Isabel Riquilda: Un regalo de la Edad Media’. La muestra, instalada en el castillo de Špilberk, en el centro de la ciudad, se celebra en ocasión del 700 aniversario de la fundación del monasterio cisterciense de Staré Brno y en homenaje a su fundadora, la reina Isabel Riquilda. Esta fue dos veces reina consorte de Bohemia y Polonia, siendo primero esposa del rey checo Venceslao II, de la dinastía Premislita y, después de su muerte, de su sucesor en el trono de Bohemia y Polonia, Rodolfo de Habsburgo.
Entre los objetos expuestos en la exposición destaca un conjunto de seis manuscritos que la reina mandó hacer en recuerdo a la creación de un nuevo convento de las monjas cistercienses y que pagó de su propio bolsillo. Cuatro de los manuscritos fueron traídos a Brno a mediados de mayo desde Viena bajo estrictas medidas de seguridad. Tras su llegada a Chequia fueron guardados, hasta la inauguración de la exposición en el castillo de Špilberk, como dijo a la Radio Checa Petr Vachůt, comisario de la exposición, quien describió con más detalle estas valiosas obras literarias.
“Son textos litúrgicos que tenía cada monasterio, y en los que se dice cuándo hay que rezar, por quién hay que rezar, etc. Por otro lado, la forma de estos manuscritos es excepcional. Es un conjunto de escrituras ricamente iluminadas que data de la era del gótico temprano”.
Como apuntó Petr Vachůt, se trata de un verdadero tesoro de la ilustración gótica de libros en el contexto de toda Europa, ya que conjuntos de este tipo se han conservado muy pocos.
“Su gran valor consiste, sobre todo, en sus decoraciones. Es la primera serie de libros góticos con ilustraciones en nuestro territorio que se ha conservado hasta la actualidad y, además, en todo su conjunto. La mayor parte de las ilustraciones son escenas bíblicas, por ejemplo, la lucha de David contra Goliat, hay muchos símbolos, como palomas o pavos. Y en todas las páginas aparece la imagen de Isabel Riquilda. Podemos verla de rodillas con un libro en la mano que entrega de regalo al monasterio de las monjas cistercienses. Y dice: ‘Estos libros los mandé hacer yo y es mi regalo al monasterio’”.
Los libros, escritos con letras doradas, eran lo más valioso que a forma de regalo se podía conseguir en el siglo XIV. La reina Isabel mandó hacer entonces nueve manuscritos para el monasterio de Staré Brno, como apuntó Petr Vachůt.
“Los nueve manuscritos se han conservado hasta la actualidad, y para la exposición logramos reunir seis de ellos por el momento. Uno se expone en copia, pero los demás son originales. En julio llegará otro original que luego también será exhibido en Špilberk. Lamentablemente, no conseguimos que nos fueran prestados los dos restantes manuscritos”.
Después de que José II de Austria aboliera en 1782 más de un centenar de monasterios, entre ellos el de Staré Brno, seis de los manuscritos fueron depositados en la Biblioteca Nacional Austriaca de Viena, dos en el monasterio de Rajhrad, cerca de Brno y uno en el Archivo Nacional Moravo.
Los libros, que se guardan en la Biblioteca Nacional Austriaca de Viena, nunca antes, desde 1782 y hasta el presente, habían abandonado la capital de Austria. Ahora la institución prestó para la exposición de Brno cuatro de ellos que, de esta forma, llegan para ser expuestos en territorio checo después de unos 250 años, junto con los otros tres que se encuentran en Moravia.
Otro objeto único de la muestra es el restaurado modelo de la basílica de la Asunción de la Virgen María, que forma parte del monasterio de Staré Brno. La reparación de la obra se hizo precisamente con motivo de la exposición. Se estima que este artefacto de madera había formado parte de una estatua arrodillada de la reina Isabel Riquilda. Supuestamente, esta figura tenía la iglesia en las palmas de sus manos. Pero la estatua de la reina no se ha conservado hasta la actualidad.
La exposición ‘Isabel Riquilda: Un regalo de la Edad Media’ se puede visitar en el castillo de Špilberk, en Brno, hasta el 20 de agosto.
La reina Isabel Riquilda (1.9.1288 – 19.10.1335), que dos veces quedó viuda, conservó gran influencia en el país incluso después de la muerte de sus esposos, los reyes de Bohemia y Polonia Venceslao II y Rodolfo III de Habsburgo. Durante largos años compartió su vida con el noble checo Enrique de Lipá, con quien descansa en la iglesia de la Asunción de la Virgen María, en el área del monasterio cisterciense de Staré Brno, que la reina Isabel Riquilda mandó a construir hace 700 años.