Los jóvenes checos no se interesan por los oficios, quieren estudiar en liceos
La primera ronda de los exámenes de ingreso a los centros educativos de enseñanza media en Chequia ha comenzado este miércoles. Al igual que en años pasados, la mayoría de los alumnos quiere ingresar en liceos y son pocos los que deciden aprender un oficio. Esto a pesar de que en el mercado de trabajo hay una demanda prevaleciente de empleados que dominen algún oficio.
Sin embargo, la mayoría de los escolares checos prefieren estudiar en liceos y otras escuelas de enseñanza de educación media general. Son pocos los que van a un centro educativo técnico o a aprender un oficio. El motivo es que la sociedad checa concibe el estudio en un liceo como algo de más prestigio, sostiene la psicóloga Václava Masáková.
”El aprendizaje de un oficio ha perdido su crédito en la sociedad checa por diversos motivos. Existe una amplia oferta de escuelas medias de educación general y la mayoría de los padres considera que si su hijo termina uno de esos institutos, podrá ir a la universidad y más tarde conseguir un puesto laboral de alto reconocimiento. Así disminuyó el respeto por los oficios, olvidándose que su aprendizaje facilitaría obtener más conocimientos en una determinada especialización que en el caso de un liceo, así como encontrar un trabajo bien remunerado”.
”Los alumnos, así como sus padres, se imaginan que un oficio conlleva trabajar en condiciones difíciles, rodeado de desorden y suciedad, como lo fue hace unos 25 o 30 años. Pero hoy la situación es diferente, se trabaja mayormente en centros con tecnologías modernas, lo que puede resultar sumamente interesante. Los jóvenes actualmente también maduran mucho más tarde que sus padres y a sus 20 años prefieren seguir estudiando que formar familia y tener que trabajar”.
El aprender un oficio no impide ni mucho menos que la persona estudie posteriormente en una universidad. Muchos técnicos con educación superior afirman que la formación profesional previa les ayudó posteriormente en el estudio de varias asignaturas en la universidad, porque conocieron su especialización desde varios ángulos.
Václava Masáková considera que el primer paso para cambiar la situación existente, es reducir el número de liceos.
La necesidad de un cambio en el sistema de la enseñaza en Chequia con el fin de que responda más a las necesidades del mercado laboral la reconoce también el ministro del sector, Marcel Chládek. En un próximo futuro quiere promover una mayor propagación del aprendizaje de oficios y la introducción en los centros de enseñanza teórico-prácticos de un examen especial de maestría, al estilo del examen de bachillerato en los liceos.
