Los checos tienen la octava semana laboral más ‘larga’ de Europa

Los trabajadores en Chequia suman una media de 37,8 horas semanales, algo menos que los vecinos polacos pero bastante más que Alemania o Países Bajos.

"¿Cuántas horas a la semana trabajan los europeos?" es el título del último informe publicado por Eurostat en el cual se desgrana y analiza la situación laboral dentro de cada uno de los territorios del viejo continente.

Según destaca la propia encuesta, la semana laboral media en la Unión Europea fue de 36,1 horas en el pasado año 2023, mientras que los checos trabajaron algo más, concretamente 37,8 horas.

Petr Dufek | Foto: Zdeňka Kuchyňová,  Radio Prague International

“Chequia se sitúa entre el grupo de países de Europa del Este, porque aquí tenemos la octava semana laboral más larga. La diferencia con los que nos precedieron en realidad es sólo simbólica. Una buena noticia es que en los últimos diez años la semana laboral de los checos se ha reducido en 1,2 horas", comenta sobre los datos Petr Dufek, economista jefe de Creditas Bank.

En este sentido, las jornadas laborales más largas se registran en Grecia (39,8 horas semanales), Rumanía (39,5), Polonia (39,3) y Bulgaria (39,0), mientras que, por el contrario, Países Bajos tuvo la semana laboral más corta (32,2 horas), seguidos de Austria (33,6) y Alemania (34,0).

Si hablamos de la distribución por sectores, las actividades económicas con semanas laborales más largas fueron precisamente la agricultura, silvicultura y pesca (41,5 horas de trabajo semanales), la minería (39,1 horas) y la construcción (38,9 horas), mientras que las semanas laborales más cortas se registraron, entre otras, en educación (31,9) y arte, entretenimiento y recreación (33).

Según señala el propio Dufek, aunque los trabajadores de países de Europa del Este pasan más tiempo trabajando, todavía están lejos de Europa occidental en términos económicos.

“Aquí juega un papel la estructura de la economía, es decir, la concentración en el valor añadido alto o bajo, pero también la forma en que se calcula dicha productividad, especialmente en los servicios. También existe la influencia de factores culturales”, destaca Dufek.