Las autoridades quitan la custodia de casi 4.000 niños a sus padres por maltrato
Casi cuatro mil menores checos tuvieron que ser apartados de sus padres por maltrato, abusos y descuido en el año 2016. Nueve niños murieron por esos motivos, según pone en evidencia la triste estadística del informe anual de protección de menores elaborado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
“La causa principal es el empeoramiento de la situación de las familias. El crecimiento del número de alcohólicos, drogadictos y ludópatas. Además crece el número de padres que se encuentran en una situación difícil, sin salida, por las deudas, por ejemplo”, indicó Marie Vodičková, de la Asociación para la Protección de Menores Amenazados.
La experta agregó que va en aumento también el número de niños hospitalizados o incluso fallecidos a causa de malos tratos.
El mal trato y abuso de niños concierne a todas las capas sociales.
“Mientras que en los años 2006 y 2007 murieron a causa de maltrato dos y tres niños, respectivamente, en 2013 fueron incluso trece niños. El año pasado fallecieron nueve menores”, dijo.
Según el Ministerio, el número de estos casos va en aumento, entre otras cosas, por el hecho de que la gente presta más atención a esta problemática, no vacila denunciar las personas sospechosas de descuido o abuso, y que la sociedad, en general, tolera cada vez menos el maltrato de los niños.
Por otro lado, los expertos agregan que las cifras reales se sitúan por encima de las indicadas en el informe, que pone en evidencia solo los casos denunciados.
La jefa del Departamento de Protección de Menores, Hana Jamrichová, señaló que el mal trato y abuso de niños concierne a todas las capas sociales, incluso a las más altas. Aunque suele suceder con mayor frecuencia en las capas más bajas.Los expertos señalan que es necesario reforzar la prevención y mejorar la ayuda a las familias pobres para que sean capaces de superar los problemas materiales y las autoridades no tengan que quitarles los hijos.
El Tribunal Supremo había indicado en el pasado que la pobreza y los problemas de vivienda no pueden representar la razón principal para situar a un menor en las instituciones estatales, sino que hay que agotar todos los medios posibles para evitar tal medida.