Hace 120 años se graduó en Praga la primera mujer médica
Anna Honzáková fue la primera médica checa, al igual que ginecóloga, activista por los derechos de la mujer y opositora al aborto.
Durante muchos años, la medicina se consideró un campo exigente e inadecuado para el sexo "débil". Y en la monarquía austrohúngara, la opinión tardó incluso más en transformarse que en otros lugares. Mientras que la primera médica del mundo, Elizabeth Blackwell, se graduó en Estados Unidos ya en 1849 y más mujeres empezaron a ejercer la profesión en Gran Bretaña y Francia en las décadas posteriores, las ciudadanas de Austria-Hungría solo podían soñar con la carrera. Hasta que la posibilidad se abrió a principios del siglo XX.
Hija de un médico progresista, Honzáková se interesó por la medicina desde pequeña. No obstante, necesitó insistir durante varios años para que prestaran oído a sus exigencias de que ese era el futuro al que quería dedicarse y la carrera que quería estudiar. El hecho de que se graduara con éxito en el primer liceo femenino ayudó solo parcialmente.
Sus compañeros masculinos la miraban con desdén
Los exámenes médicos eran públicos en esa época, por lo que siempre contaban con la presencia de numerosos compañeros. Durante la parte práctica de su prueba final, el auditorio supuestamente estaba a reventar de gente. Al final, y pesar de todo, logró superar todos los obstáculos y el lunes 17 de marzo de 1902, Anna Honzáková se graduó de la Universidad Carlos-Fernando de Praga como la primera mujer médica. A pesar de que fuera un momento histórico, solo las revistas feministas informaron sobre el evento.
Después de graduarse, Honzáková aún tuvo que pasar por tres años de prácticas clínicas no remuneradas. Además, conseguir un trabajo tampoco resultó fácil. Finalmente, en 1905, decidió establecer su propio consultorio ginecológico en el centro de Praga. Entre sus pacientes figuraban estrellas del Teatro Nacional, mujeres de empresarios, pero también mujeres pobres, a las que trataba de manera gratuita.
Emancipación y educación
Honzáková era miembro de la asociación Minerva, que administraba el liceo femenino. Trabajó en el Club Checo de Mujeres junto a la destacada feminista Františka Plamínková y también en el Comité por el Sufragio Femenino. Abogaba por la crianza responsable, allanando el camino para la educación sobre los métodos anticonceptivos y se oponía a que el aborto sirviera para reemplazarlos.
En 1939, Anna Honzáková tuvo que cerrar su consultorio por motivos de salud. Murió en Praga el 13 de octubre de 1940 a la edad de 65 años.
Hoy en día, las mujeres constituyen la mitad de los médicos y la proporción cambia constantemente. En los últimos años, hasta dos tercios de los graduados en medicina eran mujeres.