Fuentes de la historia checa más temprana en el centro de atención
¿Cuáles son los mayores problemas de la historiografía checa actual y de la enseñanza de la historia? ¿Qué posición tiene la historia en el marco de otras ramas científicas? Estos son algunos temas que se debatieron en el IX congreso de historiadores checos que se celebró estos días en la ciudad de Pardubice, en Bohemia Oriental.
Historiadores de toda la República Checa y, por primera vez en la historia de la celebración del congreso, invitados extranjeros se reunieron en la Universidad de Pardubice para discutir, entre otros, sobre cómo hacer la historia atractiva para los alumnos.
Uno de los principales organizadores del congreso, el historiador Petr Vorel opina que el tema más debatido por la historiografía checa en la actualidad son las fuentes para la investigación de la historia más temprana.
"Se trata de los archivos de la Seguridad del Estado. Aquí se enfrentan, por un lado, la cuestión de proporcionar la información, y por otro lado, la protección de los datos de personas que todavía viven. Los historiadores sabemos que hace falta evaluar las fuentes críticamente. En general, trátese de la historia moderna o antigua, hay que investigar quién es al autor de los documentos, por qué los confeccionó, etc. En los documentos de la Seguridad del Estado puede haber informaciones manipuladas. El problema de los medios de comunicación es, a veces, que no consideran los hechos desde esas perspectivas, ya que publican una información sin analizar las circunstancias", apuntó Petr Vorel.
El director del Instituto de la Historia Contemporánea de la Academia de Ciencias, Oldrich Tuma, reflexionó sobre el reflejo en el exterior de la historia checa desde el año 1945 hasta principios de los años 90, cuando se inició la transformación democrática del país.
"Un tema que interesa particularmente a los historiadores extranjeros es la expulsión de los alemanes sudetes. Luego es el año 1968 - la apertura de los archivos en los años 90 volvió a despertar el interés por este tema, existen interesantes trabajos de historiadores de Europa Occidental, así como de la antigua Alemania del Este, de Hungría, Bulgaria, Polonia, es decir de los países que participaron en la intervención en Checoslovaquia. Desgraciadamente los historiadores rusos, que tienen a disposición los documentos inaccesibles a los extranjeros, no han publicado un trabajo recapitulativo sobre la Unión Soviética y la intervención. Un gran tema, ante todo para la historiografía norteamericana, ha sido la caída del comunismo, tanto en Checoslovaquia como en Europa en general. Quien quiera investigar la caída de los regímenes comunistas tendrá que leer publicaciones en inglés, porque en checo, no las hay tantas", indicó Oldrich Tuma.
El IX Congreso de Historiadores Checos fue organizado por la Asociación de Historiadores de la República Checa, la Universidad de Pardubice y el Instituto de Historia de la Academia de Ciencias checa. Los historiadores checos se reúnen desde los años veinte del siglo pasado con una periodicidad de cinco años.