Elfos contra la desinformación en la campaña electoral checa

En una campaña electoral dominada por la desinformación, el grupo de internet conocido como “Elfos checos” lucha contra las noticias falsas. 

A los usuarios de internet que publican mensajes provocativos, ofensivos o falsos se les conoce como trols. Sus análogos, los elfos, son usuarios dedicados a frenar la desinformación y las noticias falsas.

Petr Pavel y Andrej Babiš | Foto: Jana Karasová,  Daniela Tollingerová,  iROZHLAS.cz

En la antesala de las elecciones presidenciales checas, el grupo anónimo conocido como “Elfos checos” se encarga de identificar y desmentir muchos de los bulos que circulan por internet y que podrían influenciar los resultados. Bohumil Kartous, uno de los pocos “elfos” que ha revelado su identidad, explica para Radio Praga Internacional cómo la desinformación ha afectado al proceso electoral en Chequia.

“Durante las elecciones presidenciales la situación está bastante clara. Podemos ver que uno de los candidatos es descrito por los trols como una amenaza para los intereses checos, un traidor y un individuo de dudosa moral. Esta es la imagen negativa que la escena de desinformación intenta presentar al público checo. Además, ofrecen a los votantes una solución a esta amenaza: Babiš está a favor de la paz, es alguien que defenderá a las regiones contra las élites de Praga, etc.”.

“Pavel ha muerto” decía un SMS enviado de forma masiva a los teléfonos checos a pocos días de las elecciones. En otro mensaje falso, el candidato presidencial llamaba a los destinatarios a acudir al cuartel militar más cercano en preparación para la movilización en Ucrania. Ambos mensajes, que están siendo investigados por la Policía,  fueron diseñados con el objetivo de confundir a la población. Así lo explica Kartous, para el que las técnicas de desinformación utilizadas por los trols tienen una estructura clara.

Bohumil Kartous | Foto: Kateřina Cibulka,  Český rozhlas

“Existen ciertos patrones en las tácticas de desinformación. El contenido de los mensajes suele incluir soluciones a la situación que critican, y esas soluciones son siempre las mismas. Es la idea de que un hombre fuerte como Putin u Orban es mejor solución que un gobierno democrático. De ahí podemos deducir que esos patrones se establecen con el apoyo de regímenes autoritarios y totalitarios. Es algo bastante obvio si se revisa el contenido de miles y miles de correos electrónicos en cadena, redes sociales y sitios web de desinformación.”

Según Kartous, en el caso concreto de la República Checa no hay evidencia de que este tipo de mensajes esté relacionado con la radicalización violenta de la población. “No podemos decir que no vaya a ocurrir, pero yo no lo esperaría” añade el “elfo”. Aún así, preocupa que ambos candidatos a la presidencia hayan recibido amenazas de muerte o violentas en los últimos días.

Los grupos de activistas voluntarios como “Elfos checos” son una respuesta a las consecuencias negativas del espacio virtual libre. No obstante es la misma libertad que provoca el caos informativo, la que permite a los “elfos” hacerle frente. Su objetivo es simple: identificar y denunciar las noticias falsas a través de los mismos canales en los que los trols las distribuyen: redes sociales, cadenas de mensajería o mensajes de texto.

"Esta es la forma correcta, a largo plazo, de identificar a quienes difunden desinformación de forma repetida y sistemática. Este patrón de actuación es muy diferente al de una fuente informativa que, de vez en cuando, pueda manifestar una opinión controvertida o desinformación, pero que no lo haga de forma sistemática. Creo que identificar a los propagadores sistemáticos de desinformación es el camino a seguir para regular el problema del caos informativo en el espacio digital".

Para Kartous, el anonimato y la idependencia que confiere internet lo convierten en la única forma segura de luchar la guerra informativa en la que estamos sumidos. Sobre todo, añade, teniendo en cuenta que la legislación no ha dado todavía con la “receta adecuada” para hacer frente al problema.

Autores: Marina Vidal Rico , Anna Fodor
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