El País Vasco y la República Checa unidos por el cine
La primera 'Jornada del Cine Vasco' ofreció en el Instituto Cervantes de Praga una muestra de la producción de tres prometedores cineastas, afincados en la República Checa. Beatriz Abrisqueta, Arkaitz Basterra y Diego Fandos conversaron con Radio Praga acerca de su obra, del panorama del cine checo, y también de las similitudes entre los vascos y los checos.
La idea de dar voz a la cultura vasca en Chequia a través de la gran pantalla surgió a raíz del éxito de la película 'Loreak', la históricamente primera representante de España en lengua vasca en los Óscar 2016, según explica Sigfrido Vázquez.
“Decidimos traer algunas películas en euskera o hechas en el País Vasco. La única cosa que pedí fue que al menos un día se dedicara a los cineastas que han trabajado en el País Vasco o son del País Vasco aquí en República Checa ”.
“Los checos y los vascos se parecen”
La joven cineasta bilbaína Beatriz Abrisqueta lleva instalada en Praga tres años. En la sede del Instituto Cervantes de Praga presentó tres cortometrajes: 'La Maceta', 'Un Domingo Cualquiera' y 'No More Bread'. Dos de ellos surgieron en el marco de un concurso express, cuyos participantes se enfrentan al reto de realizar una película en un determinado tiempo, explica la directora.
“Uno lo hice en Bilbao en 24 horas y el otro lo realicé para el 'Festival de 48 Horas de Praga', cuyos cortos se proyectan en el Palacio Lucerna. Lo seleccionaron y tuvo bastante éxito. La película 'No More Bread' trata de cisnes, es un corto de fantasía. Para 'La Maceta' me inspiró mucho Praga y, sobre todo, el cementerio de Olšany, que tiene mucha magia. Estuvimos grabando allí y en Grébovka. De los tres cortos que tengo dos han sido rodados en Praga”.La directora compara la capital checa con un inmenso escenario cinematográfico que rebosa de lugares inspiradores.
“Tiene zonas modernas, zonas antiguas, los “paneláky”. Siempre puedes encontrar algo especial para rodar. Es un poco mágico, como un cuento. El cementerio de Olšanská me encanta. Es tan mágico en todas las estaciones de año. Praga te inspira, vas paseando por la calle te salen ideas, te surgen historias. Esto me gusta”.Beatriz Abrisqueta incluso encuentra similitudes entre el carácter de los vascos y los checos.
“Creo que tenemos algo parecido. Por ejemplo, nos gusta a ambos el deporte e ir al monte. Eso es como sagrado. A la hora de tomar el contacto somos más fríos y más reservados. Creo que es una cosa de clima. Hace más frío, hace peor tiempo, entonces somos más reservados como los checos”.
El director Arkaitz Basterra, natural de Bilbao, vino a Praga hace cinco años para rodar una película documental. La ciudad le impactó tanto, que decidió quedarse. En las 'Jornadas del Cine Vasco' presentó su película 'Verticals', una historia real sobre las hazañas de cuatro artistas vascos en Nueva York, según nos cuenta.
“Es un corto documental que filmé en Nueva York en mi época de estudiante. La idea surgió de cómo al poeta Kirmen Uribe le hicieron una invitación para venir a Nueva York y él pidió a sus amigos músicos que le acompañaran para las actuaciones. Fueron invitados por la poetisa estadounidense Elizabeth Macklin. Yo vivía allí en ese momento. Entonces, tenía que hacer mi trabajo documental para la escuela y les pedí si podía venir con la cámara y seguirles durante las semanas que iban a estar allí. Surgió esta película que luego a la vez fue la que me llevó a hacer el primer largo documental que fue estrenado en el festival de San Sebastián. Esta película fue la que me ayudó en mi carrera como cineasta. Fue clave”.Si bien la gran parte de la producción de Arkaitz Basterra fue rodada en la República Checa, la trama de las siguiente estará situada en su tierra natal, indica.
“Es una historia inspirada en mi familia, en mis bisabuelos. Una historia que descubrí hace poco y ahora mismo estoy escribiendo este guión. Vivo aquí, mis trabajos están en Praga, pero uno quizás se haga allí”.
“Los checos suelen contar temas serios a través de comedias”
El director pamplonés Diego Fandos se afincó en la capital checa hace 11 años, entonces como estudiante de la Escuela de Cine y Televisión de la Academia de Artes Escénicas en Praga (FAMU). Actualmente ejerce de profesor de guion en la prestigiosa Prague Film School. En el Instituto Cervantes de Praga presentó tres cortometrajes.“Dos de ellos los he rodado en Praga y uno en Navarra. El primero 'Estrella' ('Hvězda') era mi proyecto final de mis estudios en FAMU. El último ('Under Pressure') lo hice hace dos o tres años aquí en Praga con el actor Jakub Kohák. Lo rodamos en una sola localización, en una piscina. Es un corto sencillo, pero tiene su punto”.
Según apunta Fandos, el carácter cosmopolita de la capital checa facilita recabar las historias.
“Es un centro de energía, donde se cruza gente de toda Europa y todo el mundo, con lo cual se generan las historias. No son las piedras bonitas, sino que es la gente. A lo mejor, en nuestras tradiciones, en las que las cosas están más establecidas, no es tan fácil encontrar estas historias. Pero después de ver maravillas como 'Loreak', que es una historia muy de allá, historias buenas hay en todas partes. Hay que saber pescarlas”.
”La ausencia de conflictos políticos dificulta la internacionalización del cine checo
Respecto a las particularidades del cine checo, Diego Fandos observa que los checos suelen contar frecuentemente historias serias a través de comedias. Por su parte, Arkaitz Basterra sostiene que la época de las comedias ya ha pasado al segundo plano, dando protagonismo a películas con tramas sociales. Algo quizás no precisamente favorable para que la producción checa se abra paso a las pantallas internacionales, explica.
“Lo que es sorprendente para mí es que es la razón por la que también los festivales internacionales han perdido interés en la República Checa. Este género no interesa ya casi internacionalmente. La República Checa tampoco tiene un conflicto político con otro país, así que tampoco interesa. Los festivales no quieren solo películas buenas, sino que quieren temas y actualidad. Quieren estar en los periódicos, quieren titulares. Y la República Checa ahora mismo no crea ningún titular internacionalmente. Desgraciadamente, para el cine checo, si el país no tiene ningún conflicto, que es bueno, está dificultando el pase del cine checo en el extranjero”.
Las 'Jornadas del Cine Vasco' cuentan con dos ediciones más que se efectuarán este y el próximo miércoles. Sigfrido Vázquez ofrece más detalles sobre el contenido del programa.
“Habrá una jornada documental sobre las relaciones del nacionalismo vasco con el nacismo con una recuperación de una película que estaba perdida. Trata sobre el mundo vasco visto desde el punto de vista de los nazis. Bastante curioso un documental de 80 minutos que va a presentar un profesor de la Universidad del País Vasco. El último día tenemos 80 Egunean que es una película de José Mari Goenaga, del director de Loreak. Creo que realmente merece la pena. Viene también Iratxe Fresneda que es una profesora e investigadora sobre el feminismo y el cine. Van a ver cosas interesantes”.Las 'Jornadas del Cine Vasco', que se prolongarán hasta el 6 de abril, se efectúan con el apoyo del Instituto Cervantes de Praga, el Instituto Vasco Etxepare y la Embajada de España en la República Checa.