El Festival de los quesitos de Olomouc trae un aroma especial a esa ciudad morava
Una nueva edición del tradicional Festival de los quesitos típicos de Olomouc, se celebrará este fin de semana en el centro de esa ciudad del este de Chequia.
Por su aroma inconfundible, los quesitos, o en checo tvarůžky, de Olomouc, tienen muchos admiradores, pero también muchos adversarios. Algunos dicen que tienen un aroma muy agradable, otros afirman que huelen mal. Sin embargo, la fama de estos quesitos, llevó a la organización de un festival reservado a este peculiar representante de los alimentos típicos checos. Este fin de semana el Festival de los quesitos de Olomouc tendrá su sexta edición, según informó Karin Vykydalová, directora del Departamento de Cultura y Turismo del Ayuntamiento local.
Los visitantes podrán degustar los quesitos y otros productos regionales en unos cincuenta puestos de venta, instalados en la Plaza Superior y la Plaza Inferior, en el centro de la ciudad. El año pasado el evento fue visitado por unas 16.000 personas que consumieron más de tres toneladas de tvarůžky.
Para saber más sobre esta especialidad morava cabe visitar la localidad de Loštice, a 30 kilómetros de Olomouc, donde radica la empresa A.W., que es el único fabricante de estos quesitos que no dejan a nadie indiferente. La empresa produce unos cuarenta tipos de tvarůžky y, de acuerdo con su portavoz Vladimír Kovář, el festival de Olomouc es una buena oportunidad para presentar la amplia variedad de estos quesos.
En la localidad hay también un museo de los tvarůžky. Jana Šilberská explica lo singular de su elaboración.
“Los tvarůžky son un queso que fermenta bajo una capa de sebo. El sebo es la superficie amarilla viscosa y el tvarůžek fermenta desde este hacia adentro. En nuestra exposición pueden ver muestras de cómo se elaboraban esos quesitos aquí en nuestra región. Quién comenzó a hacerlos y dónde no se sabe muy bien, pero las primeras menciones son de los siglos XV y XVI“.
Los tvarůžky, entonces, no son precisamente de Olomouc, porque se fabrican en Loštice, pero Olomouc era desde siempre la ciudad donde se vendían y exportaban a otras regiones.
La cuestión que queda por resolver es de dónde saca este queso su característico aroma. Lo cuenta el presidente de la Unión Lechera Checomorava, Jiří Kopáček.
“Se llega a la fermentación de las proteínas de la leche exclusivamente mediante cultura bacteriana. No se usan enzimas del cuajo de los usados normalmente para la producción de quesos naturales. Y esa es una gran diferencia”.
Para elaborar otros tipos de queso, el ingrediente principal es la leche, pero para los tvarůžky de Olomouc se usa lo que en checo se llama tvaroh y que, dependiendo del tipo, podríamos traducir como requesón, queso tipo quark o queso fresco batido.
Lo que es cierto es que estos quesitos son únicos no solo por su método de elaboración y propiedades organolépticas, sino que por sus propiedades para la alimentación sana, de acuerdo con Jiří Kopáček.
“Es el único queso de nuestro territorio que ha sobrevivido a través de muchas generaciones. Había más quesos checos originales, pero hoy en día ya no se hacen. Otra singularidad son sus propiedades nutricionales. Son quesos sin grasa, poco calóricos, de modo que son apropiados para gente que está a dieta. Además, son ricos en proteínas y, para el consumidor, fáciles de digerir. Así que son muy sanos”.
El Festival de los quesitos de Olomouc lo acompañará un taller de cocina, donde los interesados podrán fabricar el quesito usando procedimientos históricos. Habrá igualmente una cooking show, donde un renombrado jefe de cocina preparará diversos platos de comida basados en los tvarůžky.
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