El Banco Checo de Exportación tiende la mano a las inversiones con Rusia
Serán unos 360.000 euros los que el Banco de Exportación Checo dedicará a proyectos de inversión de empresas checas en Rusia este año. Tras el bloqueo de los últimos meses, el banco ha decidido volver a abrir el grifo a pesar de la inestabilidad de la política y de la economía rusa y con un Ejecutivo dividido con respecto a las intenciones nunca claras de Moscú.
Según el director general del Banco de Exportación Checo, Jan Bureš, las nuevas condiciones para la concesión de préstamos a los exportadores a Rusia serán más estrictas que las de otros países y el banco preferirá préstamos reembolsables en un período de siete años y préstamos sindicados, en cooperación con bancos rusos. Pero, pese a las precauciones, el banco asegura que durante este año ofrecerá unos 360.000 euros para proyectos orientados a Moscú. Hay que recordar que todos los préstamos adicionales para las exportaciones a Rusia se suspendieron en diciembre de 2014 y al cierre del año.
A pesar de la debilidad del rublo, de la inestabilidad económica y de las restricciones impuestas por la Unión Europea debido al conflicto ucraniano, el Banco de Exportación Checo aconseja no cancelar proyectos viables y con cuyos deudores se hayan iniciado conversaciones para ofrecerles un nuevo sistema de amortizaciones.Y es que ni en el seno del Gobierno hay un criterio común sobre qué hacer con Rusia. Mientras que el ministro de Industria y Comercio, Jan Mládek, está a favor de mantener y fortalecer los vínculos comerciales con Moscú, el ministro de Finanzas, Andrej Babiš, prefiere ser más cauteloso con respecto a lo que puede ser un mercado cada vez más problemático. Además, el Banco de Exportación ha sido criticado por la concesión de préstamos imprudentes en el pasado y el Gobierno quiere controlarlo mejor. Una enmienda propuesta por el Ejecutivo daría acceso al Ministerio de Hacienda para tener más información sobre los proyectos individuales y el tamaño del préstamo solicitado. La propuesta se produjo en respuesta a los resultados de una auditoría financiera de la Auditoría Superior del Estado que concluyó que el Banco de Exportación había concedido préstamos de riesgo por valor de casi 300 millones de euros. Una enmienda que debería entrar en vigor antes de junio de este año.