Científicos checos estudian momias con tomografía computarizada
¿Creen que es imposible unir la medicina con la egiptología? Pues, están equivocados. En el marco de un proyecto científico inaugurado hace poco en la República Checa, estas dos disciplinas se dan la mano para brindar nuevos conocimientos a historiadores y médicos.
Estudiar las momias del Antiguo Egipto sin afectar su integridad ha sido el sueño de todo historiador durante siglos. Ahora el sueño se vuelve realidad en la República Checa.
El Museo Náprstek, de Praga, y el Museo Municipal de Moravská Třebová han lanzado hace poco un proyecto que aprovecha las últimas tecnologías médicas en el estudio de los cuerpos momificados.
En la primera fase del proyecto, diez momias egipcias fueron sometidas a la tomografía computarizada, que permite estudiar los cuerpos sin dañarlos. Los médicos han sacado miles de imágenes que ahora se están analizando, explicó la médica Lubica Oktábcová.
“Cada momia fue dividida en segmentos, cada uno de 0,5 milímetros de grosor, y todos estos segmentos fueron fotografiados. Así que pueden imaginar cuántas imágenes sacamos. En total, hicimos unas 3.000 fotografías, que actualmente se están estudiando”, sostuvo Oktábcová.
El objetivo del estudio es descubrir detalles sobre la procedencia de las momias, así como el tipo de vida y las probables causas de muerte de las personas cuyos cadáveres fueron sometidos a las técnicas de conservación egipcias.
El proyecto es una continuación del trabajo realizado en los años 70 por el científico checo Evžen Strouhal, quien utilizaba en sus investigaciones la radiología.
Durante los últimos 40 años las tecnologías médicas han avanzado bastante. Así que los científicos de hoy disponen de muchos más detalles. Además del esqueleto, pueden estudiar restos de tejidos o, por ejemplo, los objetos escondidos entre las capas de la momia.No sólo arqueólogos, sino también médicos, esperan con ansiedad los resultados del estudio. De ellos pueden deducir qué enfermedades sufrían los antiguos egipcios y qué tratamientos aplicaban para curarlas, afirma el médico Jiří Bučil.
“A partir de los restos de tejidos somos capaces de reconocer los males que sufría la persona y las posibles causas de su muerte. El estudio supone un viaje al pasado con salida práctica al presente”, destaca Bučil.
En caso de éxito, otras momias “checas” serán sometidas a pruebas médicas. El país tiene en sus colecciones una veintena de cuerpos momificados, en su mayoría depositados en Praga, según afirma el egiptólogo, Pavel Onderka.“El Museo Náprstek cuenta con unas 8.000 piezas provenientes del Antiguo Egipto. Las momias forman parte de la colección. Tenemos diez cuerpos humanos completos, restos de cuerpos y también animales momificados”, señaló Onderka.
El público podrá conocer los resultados del proyecto en una exposición especial que dentro de poco será inaugurada en el Museo Náprstek, en Praga. Éste prepara, además, un libro educativo popular sobre la investigación realizada.