Chequia jugará con un equipo “B” contra Escocia obligada por el coronavirus
La selección que venció el viernes a Eslovaquia en la Liga de Naciones permanece confinada tras confirmarse dos casos positivos de COVID-19 dentro del cuerpo técnico. Un combinado improvisado defenderá frente a Escocia el liderato del grupo este lunes en Olomouc.
Nueva situación inédita la que el COVID-19 ha enfrentado al fútbol internacional, esta vez con la selección checa como protagonista. Momentos antes de vencer con superioridad a Eslovaquia por 1-3 este viernes en la primera jornada de la Liga de Naciones, se confirmó un segundo caso positivo de coronavirus dentro de su staff técnico. Pese a que todos los jugadores dieron resultado negativo en las pruebas, la Federación Checa canceló inicialmente el encuentro de este lunes contra Escocia para evitar una eventual propagación de la enfermedad. Conversaciones con la UEFA este sábado convencieron al ente checo a seguir adelante con el partido, eso sí, teniendo que reunir en tiempo récord un nuevo combinado nacional, entrenador y cuerpo técnico incluidos.
El actual preparador de la selección sub-18, Roman Holoubek, ha sido el elegido para dirigir el equipo. El exentrenador del Sparta de Praga y el Slovan Liberec contó en rueda de prensa cómo fue montar un equipo de la nada.
“La situación era bastante particular. Recibimos el encargo de hacer un equipo para jugar contra Escocia y para ello teníamos, aproximadamente, cinco horas. Así que ha sido todo muy rápido. Quiero dar las gracias a todos los clubes y entrenadores que han hecho posible que juntemos a este equipo. Y, por supuesto, a los jugadores, porque tenían vacaciones por la pausa para los partidos de la selección. No contaban con esto, pero han llegado de todos los rincones de la República Checa con muchas ganas de jugar”.
Ayudado de forma telemática desde su confinamiento por el seleccionador titular, Jaroslav Šilhavý, la estrategia de Holoubek para confeccionar este nuevo equipo ha sido buscar experiencia y que los jugadores se conozcan ya entre ellos. Por ello, el campeón de liga checo, el Slavia de Praga, pese a tener ahora confinados a siete de sus futbolistas, aporta cinco jugadores más, entre los que se encuentra el ariete Stanislav Tecl. Otros cinco se suman a la concentración del equipo “local”, el Sigma Olomouc, y cuatro del Baník Ostrava. La falta de entrenamiento se intentará superar con estos tres pilares de jugadores habituados a jugar juntos. El nuevo capitán será Roman Hubník, del Sigma, que vuelve a la selección después de cuatro años y que, curiosamente, anotó un importante gol contra Escocia hace diez en la fase de clasificación para la Eurocopa de Polonia y Ucrania.
El defensa seleccionado del Baník Ostrava, Adam Jánoš, vio acertada la forma de montar el equipo en declaraciones a la Televisión Checa.
“Eso nos ayudará. Alguien podría decir que, por ejemplo, nosotros en el Baník Ostrava jugamos de otra forma, pero nos podremos adaptar. La selección se ha hecho precisamente pensando en que habrá muchos jugadores que se conozcan y estén acostumbrados a jugar juntos”.
Con tanto sobresalto, el partido y la competición en sí casi han pasado a segundo plano. Pero la República Checa lucha por mantener la primera plaza del grupo B2 que con tanto mérito logró el equipo ahora confinado. En esa primera jornada, Escocia empató 1-1 contra Israel. Pero para Adam Jánoš se trata de un rival muy fuerte.
“Algo hemos visto en vídeo. Personalmente, no tengo experiencia con ellos, pero es fútbol clásico británico, físico. Tienen buenos jugadores que juegan en la Premier League. Desde luego, un rival duro”.
Dadas las circunstancias, Escocia es clara favorita para llevarse la victoria. Algo de lo que, como suele suceder, los escoceses prefieren no saber nada. Por su parte, los jugadores checos intentarán dar la sorpresa en el Andrův Stadion de Olomouc este lunes desde las 20:45h.