Chequia entregará a España el mando del grupo de combate de la OTAN en Eslovaquia
El Ejército checo entregará a España el mando del grupo de combate de la OTAN en Eslovaquia a mediados del año en curso. Chequia no dispone, en este momento, de tecnología suficiente para seguir liderando las fuerzas de la Alianza en el flanco Este.
Los soldados checos operan en catorce misiones internacionales como, por ejemplo, Kosovo, Oriente Medio y el Mediterráneo, donde intervienen contra los traficantes de personas procedentes de África.
El Ejército checo tiene ahora el mayor número de soldados en Eslovaquia, un total de 450. Pero a mediados de año, su número se reducirá a cerca de la mitad cuando España asuma el mando de la unidad, según indicó a la Radio Checa, Vlastimila Cyprisová, del Estado Mayor
“A finales de junio de 2024 entregaremos el mando a los españoles. Unos 200 soldados checos permanecerán en Eslovaquia. Se trata de una compañía mecanizada reforzada, una unidad de apoyo logístico y tendremos representación en el equipo internacional de la misión”.
De acuerdo con fuentes militares, la República Checa no tiene suficiente tecnología para ser el componente más fuerte de la misión y liderar el grupo. La frontera oriental de la Alianza estará custodiada por más soldados que antes, se cuenta que habrá hasta 5000 hombres en lugar de los 1100 actuales, y España aportaría unos 750.
El Ejército checo continuará contribuyendo a la seguridad colectiva mediante diversas actividades de la OTAN entre ellas el entrenamiento de soldados ucranianos. Hasta 90 instructores checos podrán participar en entrenamientos en el extranjero, al tiempo que expertos de otros países podrán entrenar a ucranianos en territorio checo. Pero el número de soldados extranjeros en el país no podrá exceder los 800 hombres, según estipuló el Parlamento.
La mayoría de las misiones actuales, en las que participan soldados checos, continuarán este año. Policías militares seguirán, por ejemplo, en los Balcanes y directamente en Ucrania un equipo de expertos se dedica a la investigación de crímenes de guerra. Se cuenta también con la participación checa en la misión internacional en el Sinaí, que supervisa el mantenimiento de la paz en la frontera entre Israel y Egipto, al tiempo que se desplazará una unidad de helicópteros a Polonia.