Chequia compra 24 aviones F-35 en el mayor desembolso de la historia de su ejército
La República Checa cerró la compra de 24 cazas F-35 de quinta generación por un precio que supera los 6000 millones de euros. No solo motivos políticos avalan la operación más costosa realizada hasta la fecha por el Ejército checo, dicen los defensores de la operación.
La ministra de Defensa, Jana Černochová, y el embajador de Estados Unidos en Chequia, Bijan Sabet, ratificaron con sus firmas este lunes en Praga la compra de 24 cazas F-35A Lighting II, una operación ya aprobada por el Gobierno en septiembre. Los primeros aparatos deberían llegar en 2031 y las últimas entregas se producirían en 2035.
Según el general Karel Řehka, jefe del Estado Mayor checo, se trata de un movimiento clave para el futuro de las Fuerzas Armadas del país.
“Para nosotros es un punto de inflexión, porque es realmente el único avión que nos permitirá ser relevantes en el campo de batalla incluso a largo plazo, por ejemplo, más allá del año 2040. Pero, sobre todo, quiero destacar que no lo veo como un proyecto para las Fuerzas Aéreas, sino que en realidad es un proyecto de transformación para todo el ejército”.
El primer ministro, Petr Fiala, destacó también que las necesidades derivadas del funcionamiento de esas aeronaves supondrá un gran impulso para la industria de defensa checa. En total, se han cerrado 14 contratos de colaboración industrial entre los países, con empresas como Lockheed Martin o Pratt&Whitney, en los que participarán 13 empresas y universidades checas. Estas colaborarán en campos como la producción de componentes, la investigación y desarrollo, el entrenamiento de pilotos y el mantenimiento y reparación de los aviones.
Sin embargo, las mareantes cifras del contrato y la previsión de gastos generan dudas y críticas entre la oposición, que consideraba esta opción como la más cara y menos adecuada para las necesidades checas. El precio superior a los 6000 millones de euros aportado por la ministra Černochová, son todo un récord en la historia de las fuerzas armadas del país. Este incluye todos los gastos necesarios para la puesta en funcionamiento de los aparatos, dijo. Pero el cálculo total de los costos hasta el final de la vida útil de las aeronaves en 2069 supera los 13.000 millones de euros.
Pero el contrato con la parte estadounidense es en dólares y se pagará durante años, por lo que cualquier variación en el cambio de divisas, suponen un riesgo millonario para Chequia.
Pero hay más argumentos en contra de la operación. Suecia, que en la actualidad alquila a Chequia los cazas Gripen a los que sustituirán los F-35, lamentó que Praga no hubiera negociado con ellos y cerrara tan rápidamente con Estados Unidos una compra que consideran poco ventajosa, ya que ellos podrían haber suministrados sus aviones por hasta la tercera parte del precio que se va a pagar.
Desde el Ministerio de Defensa se reconoce que uno de los factores a favor de los F-35 fue la conveniencia política de realizar el encargo a un socio tan importante como Estados Unidos, pero destacan también el aspecto técnico de los aviones.
En cuanto a si un país del tamaño de Chequia necesita tantos aviones, el subdirector de la sección de Desarrollo de las Fuerzas Armadas del Ministerio de Defensa, el general de brigada Jaroslav Míka, aseguró en la Televisión Checa que el país solo pretende disponer del armamento que tienen otros estados de características y número de habitantes similares a Chequia. También destacó la responsabilidad de cada miembro de la OTAN para la seguridad de la Alianza.
“No podemos mirar la República Checa como un Estado aislado y neutral en medio del océano, sino que somos parte de la OTAN. La OTAN no es una organización extranjera, sino que somos nosotros, nosotros conformamos la OTAN, y si cada Estado se va a quedar mirando cómo lo defiende otro de los estados y no va a construir unas fuerzas armadas relevantes, al final seremos muy débiles”.
Los primeros doce aviones serán fabricados en Italia. Estos deberían estar listos para 2029, cuando empezará el entrenamiento de los pilotos. Praga ahora tiene también que negociar con los descontentos suecos la prolongación del alquiler de los Gripen hasta 2035, ya que el contrato actual expira dentro de tres años.