Chequia compró los aviones españoles CASA sin conocer su precio

Foto: El Ejército checo

El precio de los aviones de transporte militar españoles CASA aparece tachado en el contrato de compra. Parece por tanto que el Gobierno de Mirek Topolánek aprobó en 2009 una adquisición de la que no conocía el precio y por la que se pagó mucho más de su valor real. Esas son algunas de las conclusiones de una investigación periodística llevada a cabo por la Televisión Checa.

Foto: El Ejército checo
La Policía investiga desde hace dos años la sospechosa compra de cuatro aviones militares españoles CASA C 295M por el Gobierno de Mirek Topolánek en 2009. Esta se produjo sin la celebración de un concurso público y fue aprobada en los días previos a que el Ejecutivo abandonara el poder, una vez había sido ya tumbado por una moción de censura.

Por los aviones se terminó pagando casi 140 millones de euros, lo que supone seis veces más de su valor real. Ahora se sabe algo mejor por qué: en el contrato de compra que recibió el Gobierno para su aprobación, los precios aparecían tachados.

En definitiva, un cheque en blanco para Omnipol, la empresa intermediaria encargada de las compras del Ejército. El ministro de Defensa actual, Alexander Vondra, recuerda su sorpresa al ver el contrato que había cerrado el Gobierno precedente.

Alexander Vondra,  foto: El Ejército checo
“Cuando asumí el cargo hace dos años y medio, ese contrato era de lo primero que quería revisar. Cuando lo tuve en mis manos, con las cifras tachadas, que no podían verse ni a contraluz, por supuesto que me molestó”.

Por el momento la Policía ha imputado a dos personas. Una de ellas es la ministra de Defensa de la época, Vlasta Parkanová.

Los expertos militares criticaron entonces aquella compra que no satisfacía las necesidades del Ejército checo. Entre los contrarios con esa argumentación se encontraba el propio Vlastimil Picek, jefe del Estado Mayor checo, que sin embargo, cuando tuvo que dar su visto bueno a la operación, lo hizo sin más. Tres años después, preguntado por la Televisión Checa, no recuerda haber dudado de la conveniencia de aquella compra.

David Ondračka, de la ONG Transparencia Internacional, cree que hubo unas presiones muy fuertes en casos como el del cambio de postura de Picek.

David Ondračka,  foto: Šárka Ševčíková,  ČRo
“Se explica por la gran presión y el tremendo lobby que hay detrás. Ahora se busca al qué manejaba los hilos. Parece evidente que no fue la ministra Parkanová, que creemos que solo firmaba y llevaba a cabo lo que le preparaban en el Ministerio de Defensa”.

Ahora se ha conocido que Omnipol no solo actuó como representante del Estado checo en la operación, sino al parecer, también representó al propio fabricante español EADS.

También ahora, debido a la investigación policial, el Ministerio de Defensa sabe ya cuánto pagó Omnipol a EADS por los aviones, pero rechaza hacer pública la suma. Las autoridades españolas sí que compartieron sin embargo las cifras del contrato a la Televisión Checa. El precio de compra fue de algo más de 98 millones de euros.

Dependiendo de cómo estuviera en el momento del pago el curso de la corona checa con respecto al euro, la diferencia entre lo abonado por Chequia y lo que recibió EADS, esto es, lo que Omnipol se quedó como comisión, oscila entre 20 y 50 millones de euros. Por tanto, será importante para la investigación conocer qué día se efectuó dicho pago.

Los cuatro aviones CASA en cuestión aún no han podido ser usados en la misión en Afganistán para la que fueron adquiridos hace tres años por culpa de los graves problemas técnicos que arrastran desde el principio. Pero ese es otro capítulo aparte de una historia fatal desde el principio.