Chequia aplica medidas de seguridad especiales tras el ataque de Berlín
El Gobierno checo ha decidido extremar las medidas de seguridad en todo el país tras el atentado en el mercadillo navideño de Berlín. Han sido instaladas barreras, grandes maceteros y vehículos de Policía para bloquear el paso en las zonas de acceso a los lugares de mayor concentración de personas con motivo de las fiestas de Navidad.
La Plaza de la Ciudad Vieja, donde tradicionalmente se instala el mayor árbol de Navidad de la capital y uno de los mercadillos navideños de fama internacional, es uno de los lugares más visitados de la capital checa en esta época. El propio ministro del Interior, Milan Chovanec, estuvo presente en la instalación de barreras en dicho lugar.
“En caso de que un vehículo irrumpa en el lugar a alta velocidad, las barreras, como mínimo, lo frenarán”.
El Ministerio del Interior, la Policía y los Servicios de Inteligencia han detectado un mínimo de 40 lugares estratégicos donde resulta indispensable extremar las medidas de seguridad.Uno de ellos es, sin lugar a dudas, el metro capitalino. Agentes de policía vigilan y resguardan los principales puntos de conexión entre las diferentes líneas, así como los accesos a las estaciones más frecuentadas.
A pesar de que este año los checos tendrán una Navidad blindada, al igual que la mayoría de los europeos, el primer ministro, Bohuslav Sobotka, dijo que no hay que dejar que el pánico nos domine.
“Quiero reiterar una vez más que el Gobierno está haciendo todo lo posible para que los ciudadanos de la República Checa se sientan seguros. Mi deseo es que tengamos una Navidad tranquila”.
Además de la capital, el aumento de las medidas de seguridad se nota en otras grandes ciudades del país. En la Plaza de la Libertad, la más importante de la ciudad de Brno, un carro de Policía y una cisterna de bomberos bloquean el paso de vehículos y tranvías.En Pilsen, conocida como la capital de la cerveza, fueron instalados enormes maceteros para evitar que vehículos lleguen hasta los mercadillos. Y un total de 500 efectivos de policía fueron llamados para reforzar la seguridad en todo el país.
Los políticos de varios países europeos coinciden en que el incremento de las medidas de seguridad debe servir para que las personas se sientan seguras y evitar que el terror les arrebate la alegría de la tradicional fiesta de Navidad.