Caballeriza de Kladruby y región minera de los montes Metálicos entran en la UNESCO

La Caballeriza de Kladruby nad Labem, foto: Lubomír Havrda, Wikimedia Commons, CC BY 3.0

La Caballeriza de Kladruby y la región minera de los montes Metálicos han sido inscritas en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. El número de lugares checos en la lista aumentó así a 14.

Los montes Metálicos,  foto: Aagnverglaser,  CC BY-SA 4.0

Una mina en los montes Metálicos,  foto: Weirdmeister,  CC BY-SA 4.0
La República Checa tiene dos nuevas entradas en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO: la Caballeriza de Kladruby nad Labem y la región minera de los montes Metálicos (Krušné hory), en el noroeste del país. Así lo decidió el Comité del Patrimonio Mundial en la reunión anual de la UNESCO que tiene lugar estos días en Bakú, Azerbaiyán.

La última vez que Chequia logró entrar en la lista fue hace 16 años, en 2003, con el barrio judío y la basílica de san Procopio en Třebíč.

La propuesta para incluir la región minera de los montes Metálicos fue presentada colectivamente por la República Checa y Alemania. La zona de minería consta de 22 partes en total, de las cuales 17 están ubicadas en Sajonia y cinco en Chequia, como describe la presidenta de la región de Karlovy Vary, Jana Mračková Vildumetzová.

Boží Dar,  foto: Joadl,  Wikimedia Commons,  CC BY-SA 3.0 AT
“La parte checa está representada en la región de Karlovy Vary por el Paisaje Minero de Jáchymov, el Paisaje Minero de Abertamy – Boží Dar – Horní Blatná, y la Torre Roja de la Muerte. En la región de Ústí nad Labem tenemos el Paisaje Minero de Krupka y de Mědník”.

En la zona se desarrolló una serie de importantes innovaciones en minería y metalurgia, que desde el siglo XVI se fueron extendiendo a diferentes partes de Europa y luego a todo el mundo.

La Torre Roja de la Muerte conmemora al mismo tiempo el sufrimiento de los presos políticos que se vieron obligados a trabajar en condiciones inhumanas en las minas de uranio de Jáchymov en los años cincuenta.

La inscripción de la región minera en la Lista del Patrimonio Mundial es un honor, añade Vildumetzová.

Jana Mračková Vildumetzová,  foto: ČT
“Estamos muy contentos de haberlo logrado. Es un evento extraordinario para las regiones de Karlovy Vary y de Ústí nad Labem. Por supuesto, esto significa que los sitios tendrán que prepararse para una mayor afluencia de turistas en los próximos años”.

La Caballeriza de Kladruby es una de las más antiguas del mundo

La segunda inscripción checa en la Lista del Patrimonio Mundial este año es la Caballeriza de Kladruby nad Labem, una de las más antiguas del mundo de su tamaño.

Foto: Šárka Veinhauerová,  Archivo de la Caballeriza de Kladruby nad Labem
La inscripción de la caballeriza en la UNESCO fue una gran sorpresa ya que originalmente se suponía que la votación se efectuaría el próximo año, dice el director de la caballeriza, Jiří Machek.

“Para nosotros es una gran sorpresa y una gran alegría al mismo tiempo. Es la culminación de nuestros esfuerzos de 12 años. Para la caballeriza esto representa una garantía de que se conservará para las generaciones futuras”.

Para diciembre de 2020, no obstante, la caballeriza tiene que cumplir una serie de condiciones establecidas por el Comité del Patrimonio Mundial para entrar en la lista. Machek asegura que cumplirá con los requisitos antes de finales de este año.

Las bases de la Caballeriza de Kladruby fueron establecidas por el emperador Maximiliano II Habsburgo. En 1579, su sucesor Rodolfo II transformó el campo equino original en una caballeriza imperial. Desde 1918 la yeguada está en manos del Estado.

En la época imperial, los caballos blancos de Kladruby fueron usados por monarcas para fines ceremoniales. Estos días se pueden ver por ejemplo en las cortes reales de Suecia o Dinamarca.

El caballo real de Kladruby, criado con sangre española e italiana, es la única raza equina proveniente de las Tierras Checas. Además, es una de las más antiguas del mundo.