Un sistema checo para detener vehículos a distancia podría acabar con las persecuciones policiales

Científicos checos desarrollan un sistema para detener vehículos a distancia. La Policía checa podría empezar a utilizar el dispositivo en 5 años.

Foto: Michal Šafařík, Český rozhlas

Todo parece indicar que las huidas y persecuciones desenfrenadas podrían desaparecer de las carreteras checas. En unos 5 años, la Policía checa podría detener a los conductores de una manera más segura e “inteligente”.

Expertos policiales y científicos de la Universidad Técnica de Praga y la de Brno están desarrollando un sistema por el que se podría apagar el motor de los coches a distancia. Zdeněk Lokaj, experto de la Universidad Técnica de Praga, demostró a la Radio Checa cómo sería el nuevo procedimiento.

“Estamos persiguiendo un coche, las sirenas están encendidas y eso significa que el conductor no obedece a la segunda llamada. Así que, podemos utilizar el sistema para parar el coche. En una tableta elegimos el coche perseguido entre los demás, que es el que va más rápido, y apretamos el botón ‘bloquear’”.

Zdeněk Lokaj|Foto: Michal Šafařík, Český rozhlas

Una vez dada la instrucción al sistema, el coche perseguido enciende los intermitentes y empieza a frenar. Explica Zdeněk Lokaj que el “truco” es que desconecta el suministro de combustible al motor. Así, la Policía es capaz de parar el coche, pero no de golpe, lo que sería demasiado peligroso, sino que el coche mantendría su inercia. Lokaj también explicó qué es lo que pasa durante la intervención policial en el vehículo del perseguido.

“Ahora estamos escapando de los policías. Estos intentarán apagar el coche. Vemos que el sistema corta el combustible, es decir, podemos pisar el gas cómo queramos, pero no acelera”.

El nuevo procedimiento evita la realización de la maniobra conocida como PIT, con la que la Policía detiene a otros vehículos con un choque controlado. En situaciones como esas, también se emplean unos “erizos” que se extienden en la carretera, las llamadas cadenas de pinchos para perforar los neumáticos. La última medida policial es disparar a las ruedas. Todo esto podría desaparecer en unos años, cuando circulen cada vez más coches nuevos ya equipados con el dispositivo necesario para poder efectuar la intervención policial a distancia, prosigue Lokaj.

“En el maletero del coche hay una caja azul que es una caja de comunicación, situada al lado de la caja blanca que controla el suministro del combustible al motor. Hoy en día, ya se instala en algunos coches. En el futuro debería ser un equipamiento estándar de todos”.

Foto: Michal Šafařík, Český rozhlas

Los científicos aprovechan en su investigación una tecnología que ya existe y permite a los coches comunicar con su entorno, por ejemplo, sobre la situación del tráfico. Se trata de unos sensores colocados en ciudades y en autopistas, dónde es posible recibir los mensajes V2X. Añade Lokaj que también desde el punto de vista jurídico, nada impide la aplicación de la novedad en la rutina de la Policía.

“Según nuestro análisis jurídico, en el que colaboramos con los compañeros de la Facultad de Derecho de la Universidad Masaryk, creemos que la actual ley sobre la Policía de la República Checa permite utilizar tales recursos”.

Por último, los expertos aseguran que será imposible hackear los vehículos. Para poder controlar el sistema, hace falta tener una clave que se obtiene al registrar el coche. La única posibilidad de entrar en el sistema del vehículo, por lo tanto, sería robar las claves policiales.