Rusia insinúa que Chequia puede ser la fuente de gas Novichok

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Rusia ha insinuado que Chequia puede ser la fuente del gas venenoso Novichok. Praga ha desmentido la información y asegura que Moscú trata de distraer la atención del atentado en Gran Bretaña.

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El atentado perpetrado con armas químicas contra el antiguo espía ruso Serguéi Skripal en Gran Bretaña ha tensado las relaciones entre Europa y Rusia.

El gas nervioso utilizado contra el ex espía ruso y su hija, que afectó a un total de 21 personas, fue identificado por los expertos británicos como Novichok, una sustancia desarrollada en los años 80 por científicos de la desaparecida Unión Soviética.

La Televisión Checa informó sobre las declaraciones del Ministerio de RR.EE. ruso que sugieren que la fuente del gas Novichok puede ser Chequia. En el despacho oficial no se descartan otros países como Eslovaquia, Suecia y EE.UU.

En declaraciones a los medios de comunicación el ministro de RR.EE. checo, Martin Stropnický, desmintió las declaraciones del Kremlin.

Martin Stropnický,  foto: Filip Jandourek,  ČRo
“Tengo que rechazar de manera categórica las insinuaciones de que la República Checa tenga algo que ver con el gas nervioso que se utilizó en el ataque. Con esto Moscú busca distraer la atención de lo que realmente ha ocurrido”.

Los gases nerviosos pertenecen a un grupo de armas químicas enormemente letales desde cantidades pequeñas. Tienen su origen en insecticidas que afectan el metabolismo humano y están prohibidas a nivel mundial.

El ministro Stropnický recordó que Chequia no dispone de ese tipo de armas.

“Quiero recordar que se ha tratado del empleo sin precedentes de una arma química en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. La República Checa respeta todos los convenios internacionales en este sentido. En nuestro territorio no se encuentran armas de este tipo, ni similares”.

Serguéi Skripal | Foto: public domain
La actitud del Kremlin, de insinuar que en Chequia puede estar la fuente del gas Novichok no favorece las relaciones entre Moscú y Praga, subrayó Stropnický.

“Esto no es un gesto amistoso de parte de Rusia. Tampoco lo esperábamos, porque fuimos uno de los primeros países en condenar el atentado y expresar a Gran Bretaña nuestra plena solidaridad”.

Las autoridades británicas han dado a entender que la responsabilidad por lo ocurrido recae sobre Moscú. Pudo tratarse de una acción directa de Rusia contra el Reino Unido, o el Kremlin ha perdido el control de esa peligrosa arma química.

Serguéi Skripal, es un antiguo espía ruso que se convrirtió en agente doble al servicio de la Inteligencia británica. En Rusia fue detenido y condenado, pero gracias a un intercambio de espías fue liberado en 2010 y obtuvo asilo en el Reino Unido.