Retiran de una exposición estatuas de la colección privada de Hitler
Tres estatuas de la colección privada de Adolf Hitler fueron retiradas de la Exposición Checo-austríaca en la localidad de Vyšší Brod en la República Checa, al provocar fuertes protestas e indignación por parte del público. Los organizadores se vieron obligados a exlcluir estas piezas después de tan sólo 48 horas.
Las estatuas debían premanecer en los jardínes del monasterio hasta el 3 de noviembre pero después de sólo dos días volvieron a la depositaría debido a las fuertes protestas de parte de los visitantes. Petr Nedoma, director de la Galería Rudofinum de Praga, que en el pasado organizó una exposición del arte stalinista, comenta la reacción negativa del público.
„La reacción de la gente es comprensible para mí. Por otra parte hay que preguntarse si las obras eran creadas para alguno de los dictadores y también distinguir entre las obras destinadas para hacer propaganda de un régimen determinado y entre las obras de la colección privada que demuestran más bien los gustos del propietario que su opinión política“.
Las estatuas formaban parte de la gran colección del líder nazi. Durante la Segunda Guerra Mundial fueron guardadas en el monasterio de la ciudad de Vyšší Brod, que servía entonces como refugio clandestino para albergar las colecciones artísticas más valiosas de toda Europa. La mayoría de las obras habían sido robadas a sus propietarios originales, y estaban destinadas a completar la extraordinaria colección artística del Museo de Hitler en la ciudad de Linz, convertida en la capital de la cultura del Tercer Reich. Sin embargo, el traslado nunca tuvo lugar.El trío de las estatuas en particular fue comprado por Hitler directamente a los autores en 1940, durante la Gran Exposición Alemana. Se trata de tres estatuas figurativas tituladas Sembrador, Remero y Afrodité. Después de la Guerra las piezas decoraban el parque del palacio de Hluboká nad Vltavou pero cuando salió a la luz a quien habían pertenecido, los trabajadores de la Galería Aleš de Bohemia del Sur las escondieron. Temían que alguien pudiera dañarlas o destuirlas. La cuestión ética de la exposición de algunas obras artísticas sigue igual de importante como delicada. Además, la percepción cambia con el tiempo, como afirma el director Nedoma.
„Napoleón Bonaparte por ejemplo, también representaba a cierto tipo del dictador. Además, las obras que se han conservado hasta ahora estaban hechas por encargo suyo. Pero el día de hoy no nos extraña este hecho, el ver las obras en el Museo de Louvre no nos causa ningún problema. Las obras antiguas también muchas veces funcionaban como propaganda política del emperador. Pero el tema del nacizmo se halla todavía demasiado presente en la población y por eso hay que distinguir con mucho cuidado entre las piezas de las que se ha abusado y las obras creadas como medio de la propaganda de un régimen."
La Exposición Checo-austríaca se celebra en dos ciudades en Bohemia del Sur, concretamente en Český Krumlov y Vyšší Brod, y en dos de Austria del Norte, Freistadt y Bad Leonfelden. Cada parte se dedica a un tema diferente vinculado con la historia de la zona, como por ejemplo la industria cervecera, el tráfico, el comercio o la medicina general. Además, en el Monasterio cisterciense los visitantes pueden ver una de las bibliotecas más bonitas del país, los palacios recién renovados y otros tesoros artísticos.Las diferentes secciones que forman la exposición permanecerán abiertas hasta el 3 de noviembre de 2013, pero de momento no se cuenta con las estatuas que pertenecieron al dictador.