Reforma checa de pensiones: seguro social menor y solo un IVA
Una prima de seguro social más baja, cuentas individuales de pensiones, un IVA unificado y jubilación a partir de los 65 años. Estos son los rasgos principales del proyecto de reforma de pensiones preparado por una comisión de expertos de los Ministerios de Finanzas y de Trabajo y Asuntos Sociales.
El nuevo proyecto de reforma de pensiones cuenta con la reducción de la prima de seguro social del 28 al 23 por ciento del salario mensual bruto.
El economista Vladimír Bezděk, que encabeza la comisión de asesores del Ministerio de Finanzas, explica que la República Checa es uno de los pocos países en Europa que financia su sistema de pensiones al 100 por ciento de los impuestos al salario.“Ello crea muchos problemas que aumentarán junto con la mayor movilidad de la fuerza laboral, sobre todo dentro de la Unión Europea. Si no cambiamos las tasas, dentro de poco la economía checa afrontará la fuga de decenas o incluso de cientos de miles de trabajadores de altos ingresos que se trasladarán a los países al oeste de Chequia donde las condiciones serán más ventajosas”.
Los ingresos que con esa medida perdería el presupuesto estatal serían recompensados con la introducción del impuesto al valor agregado único del 19 por ciento. Ello significaría, no obstante, el encarecimiento brusco de alimentos, vivienda, medicamentos y otros productos.
El proyecto de reforma propone además la creación de cuentas individuales de pensiones a las que el ciudadano destinaría el tres por ciento de su salario, obligatoriamente o como opción, contribuyéndole el Estado en el segundo caso con la misma suma.
Otro objetivo de la reforma es subir la edad de jubilación a los 65 años, tanto para los hombres como para las mujeres. A la vez se eliminarían las pensiones por viudez, y se modificarían las pensiones por invalidez.
Vladimír Bezděk analizó un proyecto de reforma de pensiones ya hace cinco años, pero entonces el Gobierno no se decidió a realizar los cambios. El economista confía en que esta vez sea diferente.
“Si no cambia nada y el sistema permanece tal como es, dentro de unos 30 años las pensiones crearían un déficit tan alto que podrían amenazar la estabilidad macroeconómica del Estado checo”.
De mantenerse el estado actual, en 2050 las primas de seguro social recaudadas no cubrirían una tercera parte de las jubilaciones pagadas, advierten los expertos.
El proyecto de reforma del sistema de pensiones es apoyado por los tres partidos de la coalición gubernamental naciente, o sea el Partido Cívico Democrático, TOP 09 y Asuntos Públicos, que quieren buscar un acuerdo también con los socialdemócratas. Estos reprochan que la reforma presentada va en contra del principio de solidaridad.