Policías checos sobrevivieron los atentados de Basora
Policías militares checos que imparten cursos de capacitación en Irak se encontraban este miércoles en el lugar donde una ola de atentados dejó 68 muertos y casi 240 heridos.
Según informara Milan Diviak, comandante del contingente checo en Irak, los policías se encontraban en una parte del edificio que no fue afectada por los ataques. Ninguno de los policías checos resultó herido.
No obstante, sesenta y ocho personas -20 de ellas niños- han muerto y unas 240 han resultado heridas.
El jefe de la Policía de la capital meridional de Irak, el general Mohamad Kadhem al Ali, indicó que los tres puestos policiales en Basora fueron atacados con misiles y afirmó que se produjeron tres explosiones sucesivas que sacudieron la ciudad.
Las explosiones, en la hora punta del tránsito matinal, con tantas víctimas representan un duro golpe para los habitantes de Basora, ciudad donde se había mantenido la calma durante la escalada de violencia de este mes en otras partes de Irak.Entre tanto, el primer ministro polaco, Leszek Miller, declaró que Polonia deberá decidir sobre la permanencia de sus tropas en Irak en función del "desarrollo de los acontecimientos" en el país árabe.
"El contingente que tenemos allí es el máximo de nuestras posibilidades y más bien lo reduciremos en vez de incrementarlo", subrayó.
El primer ministro polaco reconoció que Polonia envía con esto una señal a EE.UU. de que es necesario conceder más importancia a las iniciativas políticas que a las operaciones militares. "El problema de Irak necesita una solución política y no militar", insistió el primer ministro polaco, Lezsek Miller.
En la República Checa, por el momento no se ha cuestionado la salida del país de los policías militares que imparten cursos de capacitación en Irak.