Objetivo hundido: 80 años del mayor éxito de los pilotos checoslovacos de la RAF
Hace 80 años se produjo una de las mayores victorias de los pilotos checoslovacos que lucharon en la Segunda Guerra Mundial con la Real Fuerza Aérea británica. El 27 de diciembre de 1943 hundieron el barco de abastecimiento Alsterufer, crucial para la industria bélica alemana.
“Les habla la voz de la Checoslovaquia libre desde Gran Bretaña, la sede del Gobierno checoslovaco durante la guerra”, podía escucharse durante la época de la Segunda Guerra Mundial en la onda de BBC que aportaba información muy importante y daba apoyo moral a las personas que vivían en el Protectorado de Bohemia y Moravia de la ocupación nazi. Así, el 27 de diciembre de 1943 se pudo saber más sobre la importante operación del escuadrón 311 de los bombarderos checoslovacos, cuyo propósito era hundir el barco alemán de abastecimiento Alsterufer.
“Cuando el barco se pudo divisar por la mañana, se inició una operación conjunta marítima y aérea que consiguió hundir tanto a ese barco armado como a otros tres destructores alemanes. Estamos orgullosos de que haya sido la tripulación checoslovaca de liberación quien emprendiese este ataque exitoso contra el barco armado, hundiéndolo”.
La destrucción del barco de carga Alsterufer fue el mayor éxito de la lucha checoslovaca contra la Alemania nazi. Durante la Segunda Guerra Mundial, el barco se utilizaba para importar a Alemania desde Asia Oriental material imprescindible para la industria bélica.
Los detalles de la operación los describió para la BBC el comandante y piloto del bombardero Oldřich Doležal. En la emisión de 1943, sin embargo, no se pudo escuchar su nombre para que los nazis no se vengaran con miembros de su familia.
“El barco empezó a dispararnos. Nos dimos la vuelta para alejarnos de él, escapar del tiroteo y conseguir una mejor posición para el ataque. El barco empezó a efectuar bruscas operaciones de escape. Les ordené a todos que se prepararan para el ataque y advertí al tirador del posible ataque por parte de los pilotos de los cazas enemigos”.
A finales de 1943, el barco Alsterufer se dirigía desde Japón hacia el puerto de Burdeos en la Francia ocupada. Traía 300 toneladas de volframio, estaño y caucho.
“Giré y me dirigí hacia el barco. Entre las nubes nos acercamos a una distancia de media milla. Le dije al navegador: ‘Vamos a ello, prepárate’. Sentimos un golpe cuando explotó la bomba y en este momento el tirador de atrás reportó: ‘Objetivo acertado, veo una llama’. El barco había sido dañado en la popa, el primer disparo había dado en el blanco”.
La tripulación alemana ya no fue capaz de extinguir el incendio. Más de 70 hombres tuvieron que abandonar la embarcación en botes salvavidas y fueron cautivados por los ingleses. Durante los interrogatorios no escondieron su asombro de que la tripulación del caza no dudara en volar directa al barco a pesar del peligro que presentaba la operación, entre los disparos de la embarcación.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el comandante Doležal permaneció en Inglaterra, donde falleció en 1983. Está enterrado, junto a muchos otros pilotos checoslovacos de RAF, en el cementerio de Brookwood, cerca de Londres. Este año recibió la Medalla al Heroísmo por parte del presidente Petr Pavel.
Instituto Militar de Historia (Vojenský historický ústav)
